Toluca
En 2016 en la Zona Metropolitana del Valle de Toluca, durante 212 días se registró de mala a extremadamente mala la calidad del aire (índice superior a 100 puntos IMECA), mientras que el año pasado sumaron 208 días.
A pesar de ello, la generación de Gases de Efecto Invernadero (GEI) asociados a la calidad del aire, así como la generación de desechos urbanos, industriales y agropecuarios representan una importante problemática en la entidad mexiquense, se reconoce a través del Plan de Desarrollo del Estado de México 2017-2023.
De acuerdo con el inventario estatal publicado en 2013, estas emisiones en 2010 registraron cerca de 47 mil Gigagramos de CO2 de los cuales el sector energético es el principal responsable por actividades como el transporte, la industria manufacturera y la generación de electricidad.
Indican que estas emisiones se combinan con paisajes urbanos de suelos pavimentados, lo cual deriva en un fenómeno conocido como islas de calor, generando un aumento en las temperaturas de las ciudades.
Tan solo el año pasado en la capital mexiquense se registraron temperaturas de hasta 31°C a nivel asfalto, originadas por las islas de calor 10 y 11.
En los municipios conurbados del Estado de México a la Ciudad de México ese indicador se situó en 280 días en 2016 y 253 de enero a noviembre de 2017.
México cuenta con 22 Proaires vigentes, beneficiando potencialmente a una población de 73 millones 056 mil 328 habitantes y actualmente se encuentran en elaboración 9 Proaires más, los cuales cubrirán a 29 millones 018 mil 576 habitantes.
La entidad es el único Estado que cuenta con dos Proaires; el primero el Programa para Mejorar la Calidad del Aire de la Zona Metropolitana del Valle de México (2011-2020) y el Programa para Mejorar la Calidad del Aire Valle de Toluca (2012-2017), que benefician a más de 13 millones de personas.
Dentro del plan se indica que el reto clave de las principales zonas metropolitanas de la entidad es el deterioro en la calidad del aire como consecuencia de la urbanización y la industrialización, las cuales presentan altas concentraciones de contaminantes como partículas menores a 10 micrómetros (P10), partículas menores a 2.5 micrómetros (PM2.5) y Ozono (O3).
A pesar de los avances en términos de monitoreo de las condiciones atmosféricas en la entidad y de las acciones y proyectos conjuntos producto de la Comisión Ambiental de la Megalópolis (establecida en octubre de 2013) las concentraciones atmosféricas de O3, PM2.5 y PM10 exceden de manera persistente los límites permisibles por las normas mexicanas.
De acuerdo a datos 2017 generados por la Red Automática de Monitoreo Atmosférico de la Zona Metropolitana del Valle de Toluca (RAMA), misma que cuenta con 6 estaciones de monitoreo atmosférico en operación y una unidad móvil, se observan que en las estaciones de San Mateo Atenco y San Cristóbal Huichochitlán se registró un mayor incremento de los contaminantes PM10 y PM2.5 respectivamente y para el contaminante O3 el aumento se observa en la estación de Metepec.