A principios del mes de agosto, el estado de Oaxaca se convirtió en la primera entidad de la República mexicana en prohibir el consumo de comida “chatarra” a los menores de edad. Después de 12 días, Tabasco secunda la noción y restringe el consumo de estos productos.
Pero… ¿cómo Tabasco lo hizo posible?
Con 22 votos a favor y ocho en contra, el pleno del Congreso de Tabasco presentó una serie de reformas para las leyes locales sobre Salud, Educación y Hacienda. La mayoría de Morena junto a la bancada del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) y un voto del Partido de la Revolución Democrática (PRD). Respaldaron la iniciativa para combatir los niveles de diabetes y obesidad presentes en la población infantil del país.
En el momento en que la reforma entre en vigor, corresponderá a la Secretaría de Salud publicar una lista de los productos prohibidos sin agregar alimentos o bebidas considerados “tradicionales” en la dieta de los tabasqueños.
Algunas de las modificaciones son las siguientes:
● Incrementar un 25% la tarifa de pago para publicidad.
● Prohibir la venta, distribución y promoción de estos productos en al menos, un radio de 300 metros de las escuelas de educación básica ya sea pública o privada.
Manuel Gordillo Bonfil, presidente de la Comisión Ordinaria de Salud, determinó que lo avanzado de la reforma “no se sacó de la manga ni a la ligera”, sino que que busca soluciones para hacer frente al confinamiento de COVID-19, por medio, de instaurar políticas públicas para resguardar la vida y la salud de los niños.
¡Vamos Oaxaca!
Hoy en día, Oaxaca se ha anunciado como mentor de este tipo de reformas aunque le costó aproximadamente un año de discusiones. Finalmente con 31 votos a favor, logró la aprobación de reformar la Ley de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes para restringir la distribución, venta, regalo y suministro de bebidas azucaradas y alimentos chatarra a menores de edad.
El último cambio necesario es adicionar el artículo 20 bis a dicha ley que pasó a votación sin reversa. Ahora, para que sea una realidad, el Congreso de Oaxaca debe enviarla al Ejecutivo estatal para su promulgación (Expansión/2020).
La inquietud de realizar este tipo de acciones surge ante la emergencia sanitaria por el SARS-CoV-2 o COVID-19; en donde, desafortunadamente el número de fallecidos crece por pertenecer a los grupos vulnerables con enfermedades como la obesidad y diabetes, etc.
Esta iniciativa fue aplaudida por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF); además, de 70 organizaciones civiles en México. No cabe duda que tenemos mucho en que trabajar, ahora los padres de familia tienen la necesidad de cuidar y alimentar saludablemente a sus hijos, para poder hacer de México un país más sano y más fuerte.