Diablo: Hola, Simplicio, ¿qué andas haciendo por aquí en la colonia Roma de la Ciudad de México? Te ves como si te acabaran de ponchar...
Simplicio: Ay, Diablo maldito disfrazado de Cuarón, no asustes. ¿No ves que traigo un terrible dolor de muelas?
Diablo: Con razón. ¿Y dónde queda el consultorio?
Simplicio: Por aquí en la Roma, por tu invento de película me acordé de mi infancia y quise antes de salir de viaje venir a revisión con mi amigo dentista, el mismo al que me llevaba mi amada nana de chiquito, aquí en la colonia Roma.
Diablo: ¿Y a dónde vas de viaje?
Simplicio: A la verdadera Roma, la de Italia. Voy a retirarme del mundanal ruido políticamente polarizado de México para volar al Vaticano, a un retiro espiritual con los franciscanos, invitado por el Papa Francisco, en la próxima Semana Santa.
Diablo: !Chale!, mio caro Simplizio, ahora sí te volaste la barda...
Simplicio: Dirás el Muro...porque me voy en un austero avión comercial. Yo no soy un pillo ni viajo como líder sindical fifí en caros aviones privados.
Diablo: Ésos se roban las bases...
Simplicio: Mejor dicho, roban las cuotas a las bases... pero, Demonio,
!ya deja de usar tu lenguaje beisbolero! Estás contaminando toda la economía política y hasta la vida espiritual de México con tu ocurrente jerga.
Diablo: Pero es la moda, mio caro Simplizio.
Simplicio: Que tú has impuesto...has de andar muy contento con tus Diablos Rojos, ¿eh? Ahora eres muy amigo de los fifíes...
Diablo: Claro, pues fui con mi gran amigo y diablo rojo empresarial oaxaqueño consentido y con el mero mero beisbolero, el Machuchón Primer Bate Del País a Monterrey, a inaugurar el Nuevo Salón de la Fama del Béisbol Mexicano....
Simplicio: ¿Y quién cortó el listón de inauguración, su pariente la cantante oaxaqueña Senadora de Morena?
Diablo. Cállate, Simplicio, tú no entiendes nada de béisbol...ni de política.
Simplicio: Y tú, hablador, ¿ya te olvidaste de impulsar el soccer con tu red de escuelas de los Diablos Rojos?
Diablo: Cállate, cállate, no ves que ahora los buenos son los Pumas...: ¡GOYA!, ¡GOYA! ¡CACHUN!, ¡CACHUN! ¡RA, RA!
Simplicio: No exageres en tu nuevo servilismo. Sí, ya sé, hasta el América perdió para complacer a ya sabes quién...
Diablo: Bueno, así es la vida y la real politik en Mexilcalpan, antes Mexicalpri y hoy MexicalMorena
Simplicio: Malo, ¿ya se te quitó lo rebelde, Lucifercito? ¿No decías Non Serviam, No Serviré...cuando te rebelaste contra ya sabes Quién, el GranDioso?
Diablo: Eso es puro cuento, ¨fake news¨...¿cómo crees que yo voy a hablar en latín, como los pedantes curas?
Simplicio: Sacerdotes Ordenados...
Diablo: Más bien desordenados...especialmente, los de la mafia negra de la sotana del ¨lobby gay¨.
Simplicio: Por tu culpa.
Diablo: ¿Y YO Por Qué? Si fue el propio Papa Pancho el que hizo el pancho y los regañó y denunció por pedófilos.
Simplicio: No seas irrespetuoso, méndigo Diablo. Lo que pasa es que estás resentido porque el Pontífice Romano denunció que a México lo castigas tú, Diablo maloso, con mucha bronca.
Diablo: Puros cuentos de ese dizque Pontífice que tiene de romano lo que la colonia Roma aquí en la Ciudad de México....es puro argentino y de franciscano no tiene nada, !es jesuita!
Simplicio: !Ya me hartaste, Maligno! Me voy y de una vez voy a pedir asilo político en el Vaticano, para que no te me puedas aparecer ahí y pueda hacer mi retiro espiritual en paz, para estar preparado para la etapa de pobreza franciscana de la Cuarta Transformación.
Diablo: Bueno, allá tú, pero cuídate mucho de los curitas porque allá se cuecen también las habas, no vayas a perder tu ¨inocencia¨ en la Vía Venérea, digo, la fifí Vía Veneto de los famosos ahí en Roma, afuerita del Vaticano.
Simplicio: Maldito demonio, todo lo echas a perder. No sales de lo mismo.
Diablo: Te equivocas, yo también saldré de México pero volaré a Hollywood, a recibir mis Oscares por la película Roma.
Simplicio: Ni creas que vas a ganar, iluso.
Diablo: Cómo de que no, si mi dinero me costó.
Simplicio: ¿De qué hablas, Diablo? Ni que fuera una súper producción.
Diablo: Me refiero a toda la lana que le metí por debajo del agua a la propaganda en todo el mundo y hasta en el inframundo, ¿a poco crees que se hizo famosa la película nada más por Poncho Cuerón?
Simplicio: Pues, claro, es un gran director y la estrella, insuperable.
Diablo: Ay, Simplicio, si no le meto toda esa lana, Poncho hubiera salido ponchado en Hollywood.
Simplicio: Ya deja tu maldita jerga beisbolística, eres tan aburrido como el juego de béisbol, Diablo soso. Ya vete al infierno, con tus diablos malandrines...
Diablo: Con mucho gusto, pero primero voy a darle una vuelta a mi equipo de los Diablos Rojos, para animarlos a ver si alguno llega a las Ligas Mayores ahora que el Primer Bate va a apoyar la exportación de peloteros mexicanos (que será Cuarto Bate después de que se logre la Cuarta Transformación).
Simplicio: Jajajaja, ahora sí el que te volaste la barda en tus fantasías fuiste tú...pobre iluso.
Diablo: !Primero los pobres!
(Febrero 2019)