El martes 04 de agosto el mundo pudo dar cuenta de una terrible catástrofe ocurrida en Beirut. Imágenes y videos que nos dejaron pasmados por la magnitud de los daños ocasionados por la explosión de más de 2 mil 750 toneladas de nitrato de amonio almacenadas en el puerto de la capital libanesa.
Desafortunadamente fueron poco más de 130 personas que perdieron la vida, más de 5 mil heridos y miles de personas que se quedaron sin hogar.
Los daños económicos y sociales son visibles; sin embargo, esta explosión de nitrato de amonio también tiene consecuencias ambientales.
El nitrato de amonio, o también llamado nitrato amónico, es una sal formada por iones de nitrato y de amonio, no tiene color y puede llegar a absorver grandes cantidades de humedad formando rocas, es altamente soluble y es un producto no inflamable por sí solo. En la actualidad es comunmente utilizado como fertilizante en el sector agrícola, ya que sus propiedades hacen que la tierra sea más fértil.
Expertos en química como Luiz Carlos Dias, profesor de la Universidad de Campinas de Brasil, ha manifestado que, para que haya una explosión, debe existir una combustión previa, por lo que se presume que en el accidente del martes pasado el material tuvo que haberse expuesto a más de 300º C para hacerlo explotar.
Sin embargo, la explosión del martes es más que una tragedia, el alcalde de Beirut, Jamal Eytany, admitió que el grado de contaminación del aire por los vapores de amoniaco que se liberaron después de la explosión es extremadamente peligroso para los residentes.
Asimismo, el Centro de Investigación de Beirut ha estado monitoreando la contaminación del aire e intentando encontrar formas de eliminar las consecuencias del accidente. Aún no está claro qué daño causarán las nubes de amoniaco a la ciudad y a la salud de sus habitantes.
Por lo que las altas concentraciones de amoniaco podran causar enfermedades respiratorias o a nivel inetestinal, así como enfermedades en la piel. A menos que haya suficiente viento para disiparse naturalmente, pudiendo llevarse varios días dependiendo del clima.
Lo que nos enseña que debemos de tener mayor cuidado con los materiales que manejamos, cumpliendo con todas las normas y especificaciones para su correcto almacenamiento, ya que de lo contrario seguiremos viendo accidentes de tal magnitud que pueden traer consecuencias desastrosas para el medio ambiente y para la humanidad.