Tal vez pocos lo sepan, pero el Partido de la Revolución Democrática tuvo durante poco más de 20 años un sindicato de trabajadores que se denominó Sindicato Unión de Trabajadores del Partido de la Revolución democrática SUTPRD, una posibilidad que ningún partido político quiere que se sepa, pues implicaría que sus trabajadores, casi siempre eventuales, les constituyeran un sindicato y los obligaran a la firma de un Contrato Colectivo de Trabajo.
El caso es que ante el declive electoral del PRD, su dirigencia nacional, encabezada aún al día de hoy por el grupo de los “Chuchos” que comandan Jesús Ortega y Jesús Zambrano, decidieron dar por terminada la relación laboral con los trabajadores de dicho sindicato, intentona que comenzó tal vez desde el año 2016, donde a través de rumores y algunas propuestas directas, comenzaron el acoso en contra de la base trabajadora, situación que desembocó en un conflicto de naturaleza económica con el que este partido político argumentó la necesidad de terminar el contrato colectivo por serle, según ellos, insostenible presupuestalmente hablando.
Alguna vez escuche a una abogada laboralista decir: “el patrón siempre será patrón”, en su momento no lo entendí, después me di cuenta que hasta un sindicato que tiene trabajadores a su cargo, se comporta como cualquier patrón con éstos, lo que desde luego ocurrió con el PRD y sus trabajadores, algo ilógico si vemos sus spots en televisión, en los que ofrecen luchar por la dignidad laboral, los derechos de los que menos tienen, etc, etc, una frase a la que sumaría otra para el caso concreto “o eres militante del o eres su trabajador, porque las 2 no pueden ser”, lo digo porque muchos de los trabajadores en su momento no supieron distinguir una de la otra, convirtiéndose en victimarios de sí mismos, al preferir estar bien con el líder del grupo al que erróneamente pensaban pertenecían, que velar por sus intereses como trabajadores.
Con la complicidad de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje de la Ciudad de México, aun infestada de servidores públicos con origen en el PRD, este partido despidió a la totalidad de trabajadores de un día para otro, les negó el acceso a las instalaciones y desde luego lo dejó sin ingreso en medio de un proceso que se alentó al extremo con el aval de las autoridades locales, lo que terminó por desfondar la economía de los trabajadores, pero también sus esperanzas de que se hiciera justicia en su caso.
Los trabajadores han decidido dar por terminada su relación individual con el PRD, con ello la existencia de su Contrato Colectivo de Trabajo y el SUTPRD mismo, decisión que no se puede reprochar, si consideramos las necesidades que se generan cuando no tenemos empleo, a lo que habría que sumar los efectos negativos de la pandemia, lo lamentable de la decisión se da en el plano social, en México la organización de la sociedad no existe, el poder está haciendo de las suyas en todas las aristas con la mayor impunidad posible, afortunadamente el caso del PRD tiene fecha de solución definitiva, si en esta elección no perdieron el registro, tarde o temprano lo harán mientras los mismos sátrapas lo dirijan a nivel nacional y en cada entidad federativa.
ADENDUM
- En nuestra colaboración anterior hablábamos del caso SUTNotimex y el interés del gobierno federal por desaparecer la agencia gubernamental de noticias, tan solo 3 días después el vocero de la presidencia amenazó a los trabajadores de que trabajaban con SanJuana Martínez o la agencia desaparecería, claro si optaban por la primera, la que no podría regresar sería su Secretaria General Adriana Urrea, afortunadamente los ánimos del sindicato continúan y han decidido seguir con el movimiento, lo que representa un tache para el gobierno del pueblo bueno, que está dejando en claro que también es un represor con los que no le son afines, ojalá otros sindicatos vean que el camino seguro a su muerte es la morenización de sus organizaciones.
- Pensé que era importante hablar en esta entrega de la consulta pública contra los expresidente, pero mejor habrá que esperar a la que le organice a López Obrador en 3 o 9 años algún presidente que vea en esa acción, la posibilidad de borrar del colectivo social cualquier recuerdo del hoy presidente de la república, finalmente “el que a hierro mata, a hierro muere”.
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Abogado Postulante y Director de la Escuela para la Formación Política y Sindical A.C.
