En Veracruz no respetan ni a los niños. Los delincuentes se meten a sus escuelas como Pedro por su casa, es un estado sin ley en donde Miguel Ángel Yunes prometió que en 100 días bajaría la inseguridad, hoy están peor que con Javier Duarte de Ochoa y Fidel Herrera Beltrán, los acérrimos enemigos del turco.
La semana pasada les informé aquí sobre un frustrado levantón que la delincuencia organizada quiso realizar en una escuela primaria de Orizaba, en donde intentaron llevarse a la directora del Centro Escolar Belisario Domínguez y que gracias al llanto y los gritos de los escolares, no se concretó. Estos hechos suceden todos los días a lo largo de la entidad.
Esta vez tocó a otra escuela en Acayucan en donde los matones no se tentaron el corazón para dispararle y matar, enfrente de los niños al colega Gumaro Pérez, que asistía para acompañar en la fiesta de fin de año de la escuela a sus hijos. De nada sirvieron los gritos de pánico de los menores, ni la celebración, los delincuentes llegaron y realizaron el trabajo que alguien les encomendó.
Como estarán las cosas en tierras veracruzanas que los veracruzanos se despiertan todos los días reconociendo que estaban mejor con Javier Duarte de Ochoa, el ex –gobernador preso en el Reclusorio Norte de la Ciudad de México.
Con todo y eso, Miguel Ángel Yunes quiere dejar como sucesor en el Palacio de Gobierno de Xalapa, a su hijo el senador Fernando Yunes Márquez, pobres veracruzanos, lo que les espera. Otro Yunes Márquez, Miguel Ángel, es alcalde de Boca del Río y recientemente se quejó por las críticas que hacen sobre la inseguridad al gobierno de su papi.
Yunes Linares no ha dado resultados, su gobierno ha sido de alharacas y dedica más tiempo en buscar arruinar a sus adversarios, llámese, Fidel Herrera o Javier Duarte que en tratar de resolver los problemas de inseguridad que vive la entidad, ¿será que Ricardo Anaya lo apoye en sus pretensiones de dejar a su hijo en la gubernatura?
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Cómo la ven, los bonos de Eruviel Ávila Villegas están cada día más a la baja, ahora despacha como “gato” de Aurelio Ñuño y al paso que va terminará como edecán privado de José Antonio Meade… El servicio de trasporte Uber que inició como una opción en la capital del país y otras ciudades empieza a chafear y el costo de los viajes es cada día más caro, los abusos están a la orden del día y las quejas nunca son escuchadas por los encargados de recibirlas… ¿A qué le tira José Antonio Meade con esa incorporación de pirurris del sector financiero a su campaña, está bien que los priistas aceptaron la imposición de Los Pinos como candidato externo, pero no a que sean tan agachones, no todos se dejarán mandar por los itamitas.
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