Sonreír, fotografiarse, saludar, entusiasmar, "escuchar" y generar una expectativa, es parte de lo que desde hace unas semanas han empezado a hacer algunas personas que aspiran a ocupar un espacio relevante dentro de la política. Se trata de mostrarse de una manera que atraiga a la ciudadanía para obtener su respaldo.
Uno de los elementos de la comunicación política es seleccionar los instantes, las imágenes, las palabras, las expresiones corporales que sean más acordes al objetivo: obtener respaldo y mostrar a las personas como un perfil adecuado, confiable, profesional, para el futuro.
Cuando las personas -que aspiran a un cargo popular- realizan lo que se conoce como "trabajo en tierra" y además saben cómo potenciar sus actividades a través de la comunicación, es más sencillo resaltar su perfil, pero cuando no hay congruencia entre lo que se hace y lo que se informa, entonces se genera una distorsión que puede provocar el efecto contrario: rechazo o desconfianza.
En estas épocas de la comunicación digital, donde sabemos más rápido, y de forma más diversa, lo que ocurre a nuestro alrededor, es común que quienes hacen política crean que "estando" en las redes socio digitales es suficiente para acrecentar su imagen y popularidad. Se ha hecho frecuente buscar los servicios de un comunity manager para que maneje las redes de las personas que hacen política.
Poco se ha comprendido la insuficiencia de esa forma de comunicar, porque es solo una pequeña parte de lo que debe hacerse para lograr un posicionamiento efectivo y, sobre todo, para construir confianza. Por ello, algunas de las personas que recientemente se han enfocado en mostrarse en las redes sociales, repentinamente, con miras a proyectarse para el proceso electoral 2023 (en el Estado de México) y 2024 (federal), han generado más suspicacias.
Por otro lado, hay quienes se han enfocado a operar su presencia "en tierra", dicen, con sus simpatizantes o seguidores y han olvidado la importancia de comunicar estratégicamente el trabajo, pierden de vista que "trabajo que no se ve, no existe" y por ello no han alcanzado a visibilizarse con otros sectores que no son parte de su "voto duro".
Es una estrategia que debe articularse en diferentes frentes, aplicando las tácticas y acciones necesarias para acrecentar (o crear) su buena reputación (si la hay) y avanzar en las definiciones que pronto vendrán en los partidos políticos.
En el caso de los principales partidos políticos en el Estado de México: Acción Nacional (PAN), Revolucionario Institucional (PRI), Morena, de la Revolución Democrática (PRD), Movimiento Ciudadano (MC) y Verde Ecologista (PVEM), inició el desfile de quienes -expresa o veladamente- han manifestado su deseo de contender por la titularidad del Poder Ejecutivo mexiquense y, eventualmente, gobernar la entidad.
Desde el año pasado, había surgido una corriente de opinión para impulsar la candidatura de una mujer y lograr que, por primera ocasión en la historia del Estado de México, gobernara una mujer; sin embargo, un acuerdo cupular entre PRI, Morena y PAN, ha creado la condición para que los hombres, particularmente priístas, puedan contender y no haya riesgo de que se impida su candidatura.
Así que, a partir del momento en el que se apruebe la reforma a la Constitución Política del Estado de México, aparecerán más hombres priístas que buscarán obtener la candidatura, y se intensificará su presencia en espacios mediáticos. La pregunta es ¿si contarán con la trayectoria y reputación lo suficientemente limpias como para convencer a sus respectivos partidos y posteriormente a la ciudadanía?
Las siguientes semanas serán determinantes para las definiciones, pero es un hecho que si se cierra el paso a las mujeres para gobernar, surge el riesgo de que las cosas sigan igual que siempre: simulando cambios para que nada cambie. Gatopardismo puro.
PERCEPCIÓN
El subsecretario de Gobernación y Derechos Humanos, Alejandro Encinas Rodríguez, continúa haciendo los contactos necesarios con la clase política mexiquense afín a Morena, para construir su candidatura a la gubernatura mexiquense. Quien insista en darlo por descontado, está perdido en la necedad o la obsesión. Para el segundo semestre de 2022 habrá mayor presencia de Encinas.