“Es una coincidencia asombrosa y, desde el punto de vista científico, no hay alguna razón para que haya un sesgo en que ocurran más sismos en septiembre, mucho menos el día diecinueve”, afirmó el Ing. Arturo Iglesias Mendoza, Jefe del Servicio Sismológico Nacional en una entrevista sostenida la noche del pasado 19 de septiembre de 2022 con el medio de comunicación por internet Los Periodistas, luego de que, por tercera vez, un sismo de gran magnitud impactó al país en esta misma fecha.
El especialista informó que los tres sismos –uno ocurrido en 1985, otro en 2017 y el de esta semana en 2022– son muy diferentes entre sí y en gran medida no están relacionados, ya que su génesis es completamente diferente. Los tres tienen epicentros muy distantes; el de 2017, asociado al fenómeno de subducción, fue un sismo intraplaca, es decir que ocurrió dentro de la placa tectónica subducida, a muchos kilómetros de la costa; y el de 1985 y 2022 ocurrieron en la costa, donde generalmente ocurren sismos de gran magnitud. Lo único que los hizo coincidir extraordinariamente es la fecha, ningún otro rasgo los asemeja, ni relaciona. “Y seguirá temblando”, concluyó el funcionario universitario. https://www.youtube.com/watch?v=AXdXoIVGY_8&t=104s
La principal lección que nos deja esta nueva edición del 19S, con un sismo de 7.7 grados, epicentro en las costas de Michoacán, es el reconocimiento de la naturaleza sísmica de nuestro país –bañado por dos océanos, atravesado por dos grandes cordilleras montañosas y un centro hiper poblado asentado en una cuenca–, es que tenemos que continuar adaptándonos a que retiemble en sus centros la tierra a cada rato. Tenemos que aprender a convivir con estos fenómenos naturales, en un contexto que nosotros mismos hemos construido, cuyos riesgos son latentes, impredecibles y cada vez más frecuentes.
México ya acumuló 6 sismos de magnitud mayor a 7 grados en los últimos cinco años –dato inédito en la historia moderna de nuestro país y quizá del mundo– y puede usted consultarlo aquí: http://www2.ssn.unam.mx:8080/sismos-fuertes/. Aún así seguimos sin dedicar esfuerzos sustantivos y suficientes para la generación de una cultura de prevención sísmica que implique una legislación específica que asigne, etiquete y fiscalice presupuestos del erario público, en los tres niveles de gobierno, para desarrollar por lo menos cuatro políticas públicas urgentes que enseguida se describen.
1) Incorporación de la asignatura de protección civil en los planes y programas educativos a nivel básico y medio superior, con énfasis en el conocimiento de los principales riesgos de cada zona, considerando la comprensión del fenómeno sísmico en todo el país; 2) Sancionar con mayor energía a particulares y/o servidores públicos que transgredan los Planes de Desarrollo Urbano Municipales, los usos de suelo y las restricciones por derecho de vía en ríos, áreas naturales protegidas y zonas de riesgo; 3) Fortalecer las normas y criterios de construcción de desarrollos inmobiliarios, estableciendo límites y alcances estandarizados de tipo habitacional, comercial e industrial, en zonas de riesgo sísmico y de impacto de ciclones tropicales; 4) Crear planes y programas de movilidad ciudadana adaptados a esta realidad cada vez más contundente, que permita reducir riesgos a la población que se concentra en las grandes ciudades, principalmente en aspectos tales como: transporte público; diversificación de modalidades laborales (horarios escalonados y teletrabajo) y descentralización de las instituciones públicas y privadas, principalmente digitalizando y homologando trámites para que se realicen a distancia.
Estas y otras propuestas parecen utópicas, inviables y quizá ingenuas, sin embargo pensar y desarrollar las ciudades bajo nuevos paradigmas de protección ciudadana, considerando los riesgos que se enfrentan en la vida moderna, es quizá el nuevo horizonte hacia donde debemos mirar en un mediano plazo y poder elegir dónde vivir, dónde trabajar y dónde estudiar sin riesgos. ¿Necesitamos otro sismo devastador para tomar en serio un cambio en nuestra forma de habitar nuestras ciudades? En tanto, los cambios empiezan en casa y recuerde que el espacio más seguro lo hace usted. ¡Feliz fin de semana!
Hugo Antonio Espinosa
Fue Director del Heroico Cuerpo de Bomberos de Toluca,
Subdirector de Protección Civil e Inspección en la SCT Federal.
Actualmente es Subdirector de Emergencias en el Valle de Toluca, en la Coordinación General de Protección Civil, EDOMEX