Sin lugar a dudas, cientos de miles de ciudadanos convencidos, marchamos ayer domingo para que la democracia continúe y no sea dinamitada por el presidente Andrés Manuel López Obrador por la iniciativa de Reforma Electoral enviada desde hace meses a la Cámara de Diputados y en la que sus incondicionales legisladores morenistas, así como sus rémoras del PT y Verdes ecologistas la aprueben en las próximas semanas.
Habitantes de las 18 alcaldías de la Ciudad de México y de los 54 municipios conurbados del Estado de México, caminamos desde el Ángel de la Independencia hasta el Monumento a la Revolución, en defensa de la democracia que tanto trabajo ha costado y en defensa de #ELINENOSETOCA que desea desaparecer el tabasqueño para darle paso al Instituto Nacional de Elecciones y Encuestas.
Pese a los indebidos, absurdos, burdos y continuos insultos espetados durante toda la semana pasada por el inquilino de Palacio para los mexicanos que rechazamos su ventajosa reforma electoral en sus millonarias y cada vez más nefastas “conferencias” mañaneras, a quienes nos acusó de corruptos, racistas, clasistas, cretinos acomodaticios, alcahuetes, aspiracionistas, así como el de ambiciosos vulgares. Cuán equivocado está el tabasqueño en sus conceptos.
Es vergonzoso e indignante ver al López Obrador que siga sembrando odio, divisiones y rencores entre los estratos sociales de nuestro de por sí vapuleado país, todos los días, en lugar de sumar voluntades para sacar adelante al país del caos en que nos ha sumido su administración, pero principalmente el jefe del Ejecutivo con sus erráticas políticas públicas y sus autoritarias decisiones.
No hemos tenido crecimiento económico ni desarrollo social en estos cuatro años morenistas, se han muerto un millón de mexicanos por covid-19, será el régimen más ensangrentado, por lo pronto ya suman los muertos a manos del crimen organizado en todas sus modalidades, se perdieron más de 11 millones de empleos por el cierre de un millón 500 mil empresas por la pandemia. Pese a los yerros cometidos el tabasqueño afirma que la mal autollamada cuarta transformación “va por el camino correcto y que vamos requete bien”. (¿?).
Es por ello, el hartazgo ciudadano que ha creado Amlo en menos de cuatro años de su gestión, que sigue creciendo día a día entre decenas de millones de mexicanos y que no estamos dispuestos a seguir tolerando actuaciones disruptivas del tabasqueño, por lo que la marcha por la democracia de ayer se desbordó en unidad, en entusiasmo, en camaradería, en deseos positivos y en el que anhelamos un cambio radical para los comicios presidenciales de 2024.
En la marcha de ayer #ELINENOSETOCA duró dos horas y solamente hubo un orador: Isaac José Woldenberg Karakowusky, quien fue Consejero Presidente del entonces Instituto Federal Electoral (1996-2003), el político y académico, señaló que “estamos reunidos aquí con un solo objetivo claro y trascendente: defender el sistema electoral que varias generaciones de mexicanos construyeron, que ha permitido la convivencia y competencia de la pluralidad y la estabilidad políticas, la transmisión pacífica de los poderes públicos y la ampliación de las libertades”.
Prosiguió y expuso: “todo eso constituye un patrimonio común y por ello estamos aquí, ciudadanos de muy diferentes orientaciones políticas y extracciones sociales, militantes de partidos, integrantes de organizaciones sociales y personas sin filiación política que deseamos que México sea la casa que nos cobije a todos”.
José Woldenberg, dijo que estamos aquí ejerciendo nuestros derechos. El derecho a manifestarnos, a opinar, a reunirnos de manera pacífica para expresar nuestras preocupaciones y aspiraciones. Somos parte de una marea de opinión, que aprecia y defiende la democracia.
“México no merece una reforma constitucional en materia electoral, impulsada por una sola voluntad por más relevante que sea. Hay importantes lecciones en el pasado: las reformas que fueron fruto de voluntades colectivas forjadas con los métodos probados y comprobados del diálogo y el acuerdo, México no puede ni debe trasladar el padrón electoral a otra institución porque el INE ha cumplido con creces en la elaboración de un listado confiable, cuyas credenciales se han convertido de facto en cédulas de identidad ciudadana”, señaló el exconsejero del IFE.
Woldenberg Karakowsky hizo un llamado a todos los grupos parlamentarios -sin exclusiones ni excepciones- los que conforman las Cámaras del Congreso Federal y de los 32 Congresos en las entidades, a que defiendan lo edificado en materia democrática y no conduzcan a nuestro país, a una etapa venturosamente superada: la del autoritarismo que se auxiliaba de autoridades electorales a modo.
“El día de hoy, refrendamos nuestro profundo compromiso con la democracia y por ello defenderemos un sistema electoral que nos cobija a todos y que permite la coexistencia de la diversidad y la substitución de los gobiernos por vías pacíficas y participativas. Ese es el México que queremos: un México para todos, un México cuya diversidad cuente con un formato para su convivencia y competencia”
Añadió: por eso decimos: No a la destrucción del INE, no a las destrucciones de los institutos locales, no a la destrucción de los tribunales locales, no a la pretensión de alinear a los órganos electorales a la voluntad del gobierno, no al autoritarismo, sí a la democracia, sí a un México democrático”, concluyó José Woldenberg.
Así pues, la primera marcha celebrada ayer en más de 54 municipios de varios estados de la república mexicana, de Estados Unidos e inclusive de Europa, del #ELINENOSETOCA tuvo un éxito rotundo, en la que participamos cientos de miles de ciudadanos por voluntad propia sin haber un solo acarreado, le exigiremos a los diputados federales de todos los grupo parlamentarios que no aprueben la reforma electoral retrógrada de López Obrador, porque sería encaminarlo a perpetuarse en el poder y eso es lo que desea el inquilino de Palacio Nacional. ¡No al autoritarismo!
PABLO GÓMEZ, OTRO LACAYO DE AMLO
Pablo Gómez Álvarez, otrora aprendiz y coordinador de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), quien ya se había tardado en salir en defensa de su jefe y superior, Amlo al declarar el jueves pasado que con mentiras habla la oposición sobre la reforma electoral y se oponen para erosionar al gobierno.
Entrevistado por el periódico El Universal dijo que el grupo que dirige al INE milita en la oposición como un partido más (vaya barrabasada del experredista), porque “no deberían opinar sobre este tema" (¿). Claro están defendiendo la chamba. Como todos, los ahora morenistas, sostuvo que la reforma busca el fortalecimiento electoral y su independencia.
Por supuesto que las mentiras provienen de los cautroteros, desde que tomaron posesión y son encabezados por López Obrador quien lleva más de 80 mil mentiras, todo un récord de Guinnes y por ende, sus vasallos se tiran al piso para defender sin argumentos de paso a su jefe y superior porque se sienten los espadachines del inquilino de Palacio al que defienden con todo.
Están cegados y embriagados de poder que los ha envilecido, pues nunca que imaginaron que iban a ser gobierno, lo que han entendido es que decenas de millones de mexicanos que no comulgamos con su fallido régimen, no queremos que Amlo dinamite la democracia y se unja como el jefe máximo y se consume la dictadura que anhela el tabasqueño.
Recordemos que el entonces Instituto Federal Electoral (IFE) se fundó el 11 de octubre de 1990, fue un órgano constitucional, que al igual que los Tres Poderes de la Unión, su existencia estaba contemplada directamente en nuestra Carta Magna. Sin embargo el 22 de agosto de 1996 (seis años posteriores a su fundación obtiene su autonomía.
Un año después, 2007, los diputados federales convinieron remover a ese Primer Consejo General, ampliándole sus facultades de fiscalización.
Recordemos que el INE le dio el triunfo a López Obrador en 2018, es un instituto que tiene 32 años de fundado y cuenta con la mayoría de la sociedad civil, pues ha dado frutos a nuestra incipiente democracia, la que hemos visto con alternativa de cambios de poder desde 2000, cuando se alzó con el triunfo en dichos comicios electorales el panista Vicente Fox Quesada, quien iba en alianza con el Partido Verde para derrotar por primera ocasión al PRI.
De esta manera se ha tejido la democracia en nuestro país, con un INE que opera efectivamente, con elecciones limpias y transparentes en las que no puede haber fraude alguno, porque el sistema electoral se ha ido perfeccionando paulatinamente. ¡No a la Reforma electoral de Amlo!
