Todavía negocian, se invitan a comer y se telefonean; se amenazan y se mandan ultimátums. Sostienen reuniones con café y otras con buen tequila. Algunas citas acaban en borrachera con buenos vinos y licores extranjeros.
Sudan, se truenan los dedos y otros muestran músculo con marchas; mítines y plantones.
Los líderes partidistas –que no siempre deciden– dan buenas noticias, y muchas malas. Bloofear es su común denominador: todos presumen lo que podrían lograr y ofrecer en caso de llegar.
Así es la vida de los que buscan un puesto de elección popular, mientras usan cada cinco minutos la aplicación WhatsApp de sus teléfonos inteligentes.
Las listas se pueden mover, nada está definido aún; claro algunos nombres ya son inamovibles.
¿Pero que hay de los alcaldes que quieren repetir? Hasta este momento, casi 250 presidentes municipales en el país han manifestado su intención de repetir en el cargo, aprovechando las recientes modificaciones a la ley.
Según sus cálculos, sus gobernados los volverían a votar; se sienten confiados en que serían premiados en las urnas. Evalúan, claro, si el voto antisistema no los alcanzará.
Salvo honrosas excepciones, los alcaldes, son repudiados por los sufragantes; la deficiente recolección de basura, las luminarias fundidas, la terrible inseguridad, la corrupción galopante, la impresentable burocracia en las oficinas públicas, los moches que se cobran por cualquier trámite y las vialidades, en su mayoría intransitables, es parte del muy justificado encabronamiento social.
Por razones de espacio, preguntémonos cómo les irá los que quieren repetir en el Estado de México:
¿Le alcanzará a los perredistas Juan Hugo De la Rosa (Nezahualcoyotl); Armando Portugués (Tultepec); Félix Alberto Linares (Ocuilán); Aníbal Martínez (Luvianos); Tomas Suárez (Cocotitlán); Leobardo Mondragón (Isidoro Fabela) y José Félix Gallegos (Amatepec)?
¿Le alcanzará a los priistas Fernando Zamora (Toluca); Marcos Manuel Castrejón Morales (Zinacantepec); Jaime Cervantes (Lerma); Marisol González Torres (Jiquipilco); Julio César Serrano (San Mateo Atenco) y Francisco Trinidad (Ixtapan de la Sal)?
Les alcanzará a los panistas mexiquenses -por cierto todos del grupo político de Enrique Vargas que va por la reelección de Huixquilucan-; Ana Balderas Trejo (Atizapán de Zaragoza); Leticia Zepeda Martínez (Chapa de Mota); Héctor Zepeda (Temascalapa); Miriam Escalona Piña (Melchor Ocampo); Jorge Espinoza Arciniega (Soyaniquilpan) y José Luis Castro Chimal (Huehuetoca)?
Veremos el primero de julio si supieron controlar a sus policías, si vigilaron la recaudación de las contribuciones municipales y si las utilizaron en bien de su gente; si son de calidad los servicios públicos; si lograron promover la participación ciudadana o si son reprobados en las urnas con el arma democrática, conocida como voto.
El primer día del séptimo mes de este año, será histórico, porque marcará un parteaguas en el comportamiento de los futuros primeros ediles; si muchos repiten, se comprobará que quien trabaja bien, será premiado con quedarse en su oficina. Pero quien sea lanzado, será ejemplo por muchos años, de que un impresentable no puede volverse a promover frente a la comunidad enardecida.
En este espacio, hablaremos de los que pasen la prueba, pero también de los que fueron lanzados a la calle a través del enojo ciudadano.
*Periodista, editor y radiodifusor
@GustavoRenteria
www.GustavoRenteria.mx
