Desde hace unos meses se vive una controversia social respecto al libre tránsito en la carretera de cuota Toluca-Atlacomulco, misma que forma parte de la ruta Panamericana, llamada así porque es un sistema de carreteras de aproximadamente 18 mil km de largo, que vincula a casi todos los países del continente americano, por lo cual no debería costar pasar por ella.
Sin embargo, en 1992, el tramo, que va desde Atlacomulco hasta la caseta del Dorado en Toluca, fue entregado en concesión a la empresa operadora de carreteras Alfa S.A. de C.V. con un plazo de cinco años, pero éste se fue extendiendo indefinidamente a beneficio de empresarios y clase política. La más reciente renovación de la concesión llega hasta el año 2053.
La controversia en sí, derivó de que la empresa concesionaria solicitó un registro especial para aquellos residentes de la zona que tienen el beneficio de exentar el pago de la cuota con solo portar su credencial para votar con fotografía.
De acuerdo al comunicado de la empresa, a partir de junio de 2024 ya no sería suficiente con presentar la credencial; los interesados en exentar el pago deberían registrar su vehículo a un padrón digital para obtener un pase impreso y seguir con el beneficio.
Evidentemente hubo inconformidad, primero, porque el derecho al libre tránsito es para las personas no para los vehículos.
Segundo, porque van varios años que la empresa viola los acuerdos tomados cuando se les otorgó la concesión, específicamente en el anexo 13 de dicho documento, el cual indica que se debe permitir el paso sin peaje a residentes de Atlacomulco, Ixtlahuaca, Jocotitlán, El Oro, San Felipe del Progreso, Temascalcingo, Acambay, Aculco, entre otros municipios de la región, lo cual ya no ocurre.
Ahora solo les exentan del pago total del peaje a residentes de contadas localidades. Los demás deben de pagar aunque demuestren vivir en los municipios incluidos en el acuerdo.
Inconformes encabezados por Fermín Romero Valdés, buscaron apoyo de la Legislatura mexiquense para evitar que la nueva medida entre en vigor en junio, logrando algunas demoras para la puesta en marcha de la mencionada modalidad sin que, hasta el momento, el Gobierno Estatal o algún ente legislativo haya manifestado públicamente alguna postura o instrucción en ese sentido.
La indefinición priva en este tema, en pleno proceso electoral, ante el temor de que a partir de junio de 2024 se viole una vez más el derecho al libre tránsito de los pobladores de esta región con la puesta en marcha del padrón digital de vehículos con permiso de exentar el pago. Porque de los tramos de carretera “libre”, basta decir que están para llorar.
