Daniel Sibaja, el secretario de Movilidad del Gobierno del Estado de México, acaba de vivir la boda de sus sueños, misma que podría convertirse en la pesadilla de su vida.
El secretario de la 4T, Daniel Sibaja, realizó una boda con Ingrid Bolaños, valuada en aproximadamente en 5 millones de pesos, el pasado 5 de octubre, en la Hacienda San Carlos Borromeo, ubicada en exclusiva zona de Yautepec, en el vecino estado de Morelos.
Entre los invitados al millonario festejo, destacó el secretario de Economía del Gobierno de México, Marcelo Ebrard, entre otras muchas otras personalidades de la 4T, que en total sumaron 500 invitados.
Entre las amenidades se contaba con una pista de baile pintada a mano, cientos de limones frescos con diversas decoraciones, incluyendo guías completas de árbol de limones decorando el ambiente toscano; bueno, hasta las latas de cerveza fueron personalizadas una por una. Los invitados lucían una pulsera luminosa, sello de la costosa planeadora de bodas Montserrat Pérez, quien solo realiza eventos de famosos y millonarios.
Los invitados a la boda del señor, destacaron el ¡suculento y costoso pastel cubierto de ¡oro comestible! Vaya caprichitos cuando él mismo impulsó la Ley de Austeridad Republicana, como diputado local en la LXI Legislatura local. Por cierto, la cena tuvo un costo de 8 mil pesos por persona. Más de la mitad del país no los gana al mes.
Lo que sí fue muy notorio, es que la gobernadora del Estado de México, Delfina Gómez Álvarez, ¡No estuvo presente en la boda! No sabemos si no fue convidada o si ella no quiso asistir para no ser evidenciada en tremendo derroche de recursos, o bien, no aprobó el tremendo festejo.
Me queda claro que cada quien puede gastarse su dinero en lo que se le dé la gana, para eso trabaja; sin embargo, muchos morenistas que alardean sobre la austeridad republicana, han sido captados en festejos y fiestas que de austeras no tienen nada y que, de acuerdo a sus bajos salarios que presumen, tampoco podrían ser costeados.
Entre estas fiestas millonarias recordamos la boda del morenista Santiago Nieto; o la fiesta de 15 años de la hija de José Manuel López Beltrán, a la cual, por cierto, tampoco se le vio a su papá, Andrés Manuel López Obrador, entonces presidente de México. La excusa fue que los gastos fueron sufragados por su multimillonaria esposa.
Y no podemos dejar fuera de las costosas fiestas de la 4T, los 15 años de Mario Delgado, entonces líder nacional de Morena.
Volviendo a la fiesta de Daniel Sibaja, el escándalo ha sido tal, que la presidenta Claudia Sheinbaum abordó el tema en la mañanera del jueves, en donde dijo que, aunque no conocía el caso específicamente, “es muy importante, predicar con el ejemplo”.
Pues el caso ya está en el nivel más alto y choca con los preceptos de lo que, bien dijo la presidenta de México, predica la 4T. Esta boda podría convertirse en la peor pesadilla del secretario y que podría hasta hacerle perder la chamba. Seguro dará más de qué hablar.
¿Este mes habrá despenalización del aborto? – Todo parece indicar que la voz de las diputadas locales de Movimiento Ciudadano, Ruth Salinas, de la independiente, Paola Jiménez, y muchas otras que se sumaron a esta petición este mes tendrán eco, pues se anunció que el 25 de noviembre se sesionará exclusivamente para que la interrupción del embarazo sea legal.
El mismo líder de la JUCOPO, Paco Vázquez, líder también de la bancada morenista de la LXII Legislatura local, aseguró que esta ley va, y aunque el líder de la bancada panista, Pablo Fernández de Cevallos, diga que ellos van en contra, y Elías Rescala del PRI le rehúya al tema y no diga ni sí ni no; parece que este mes sí se despenalizará el aborto. Todas las demás fracciones la apoyan.
Qué conste que esto motivará fuertes movilizaciones de bloques que están en contra de esta ley, unos con base en religión y principios y otros bloques denominados “negros” o simples inconformes con este tema. Ya saben, siempre hay variedad de opiniones. Pero de que va, va.
En el tintero. Ganó Trump
Y ya para despedirnos, el triunfo de Donald Trump pondrá a prueba el nivel de negociación de la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, y también su paciencia y su capacidad política para lograr una buena relación con un presidente que, entre muchas acusaciones, le pesa la de ser misógino.
Tampoco creo que la tenga fácil, Claudia Sheinbaum no es una perita en dulce y es muy terca, y si no, que se los diga el Poder Judicial de la Federación. Vamos a ver de qué cuero salen más correas, pero ojalá que gane México.
Nos leemos la próxima semana
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