Toluca/Estado de México
Durante el Foro de Divulgación Forestal, organizado en la Legislatura, el diputado de Morena, Margarito González Morales, dio a conocer que la corrupción ha contribuido a la deforestación de la entidad, que en siete años se ha triplicado.
Es por ello que indicó es necesario que el cuidado de los bosques sea considerado como tema de agenda pública para los tres niveles de gobierno.
En presencia de académicos, investigadores, productores, propietarios de áreas forestales, diputados, presidentas y presidentes municipales, coincidieron en que la veda forestal no resolvería los graves problemas de tala clandestina en la entidad.
Asimismo, el diputado indicó que los bosques deben convertirse en tema prioritario en las agendas públicas de los diferentes niveles de gobierno.
“La sustentabilidad del bosque se ha mermado debido a los procesos de deforestación acelerada, provocados por la tala inmoderada legal e ilegal, los cambios de uso de suelo forestal, agrícola a ganadero, o rural, los incendios forestales, las plagas o enfermedades de los árboles”.
Como presidente de la Comisión de Desarrollo Agropecuario y Forestal, enfatizó que de acuerdo con organismos ambientales internacionales y de México, en la entidad además del 20% de aprovechamiento autorizado o legal, a través de 480 autorizaciones que involucran alrededor de 230 mil hectáreas, se le debe sumar la deforestación que se ha triplicado del 2012 a la fecha, y es una daño que no se puede cubrir.
Es así que sostuvo, el daño a la biodiversidad debe preocupar a todos, y aunque reconoció que por recomendación de los especialistas, la veda no sería la única manera de revertir este problema, sí era necesario realizar un exhorto para que realicen nuevos estudios sobre la deforestación y que la SEMARNAT requiera al Ejecutivo decretar veda temporal forestal en los cinco puntos críticos.
El director general de Probosque, Edgar Consuelo Contreras, recordó que en 1991 se implementó una veda forestal, debido a la creciente tala indiscriminada aunada a la presión social, y que se vislumbraba como una de las mejores alternativas para proteger el bosque pero generó debilitamiento de la masa forestal y aumento de incendios.
A partir de 1995, la entidad otorga financiamiento a la elaboración de diversos programas de manejo forestal, además de ampliar y mejorar la estrategia de prevención y combate a incendios forestales, y los propietarios protegen al bosque de plagas y enfermedades.
Carlos Valdez Sandoval, de la Sociedad Mexicana de Profesionales Forestales, destacó que los dueños de los montes son quienes han puesto el ejemplo a lo largo de 20 años para conservar sus recursos, por lo que el manejo forestal debe tratarse como actividad armónica, un negocio lícito, como actividad productiva que genera empleos y permite cuidar los bosques.
Sostuvo que se debe reconocer la realidad del calentamiento global, dejar de usar combustibles fósiles, integrarse a un programa de fuentes de energía renovables.
Abel Plascencia, investigador de la Universidad Autónoma Chapingo y gerente de Sanidad Forestal de la Comisión Nacional Forestal, señaló que de no atender con oportunidad las plagas forestales podemos llegar a perder zonas boscosas, como sucedió en Honduras que perdió el 30 por ciento de sus superficie forestal, por lo que los gobiernos de los estados y municipios deben atender de manera oportuna las plagas y enfermedades de manera natural, con diferentes alternativas, no utilizando químicos que impacten de manera negativa a la salud forestal.