Toluca/Estado de México
Los diputados del PAN en la Legislatura coincidieron en que es indispensable exhortar a los 125 municipios para que en coordinación con la Secretaría de Salud y la Secretaría del Medio Ambiente, implementen estrategias y verificaciones permanentes en los centros de control caninos y centros antirrábicos, con la finalidad de garantizar un trato digno a la fauna doméstica en cualquier procedimiento implementado.
En su oportunidad el líder de la bancada, Anuar Azar, dijo que de acuerdo a la Asociación Mexicana de Médicos Veterinarios Especialistas en Pequeñas Especies (AMMVEPE) México representa la mayor población de perros en América Latina, de los cuales el 70 % son callejeros y el 75% en toda su vida no han sido vacunados, lo cual representa un problema sanitario con riesgo de constituirse como posibles reservatorios de enfermedades.
De igual forma, que esta cifra se suma a que de acuerdo al INEGI 7 de cada 10 perros son víctimas de agresiones y abandonos.
Es así que la falta de profesionalización para un trato digno de los animales en los centros de control canino evidencian la carencia de un personal calificado para aplicar correctamente lo establecido en la ley, además de la falta de recursos debido a que no es agenda en los diferentes gobiernos.
Consideró que desafortunadamente la entidad se ha convertido en un cementerio de perros, que son abandonados por estar enfermos o han crecido y dejan de ser vistos como un juguete el cual ya no es de su agrado.
Ejemplo de ello es que según datos del Instituto de Salud del Estado de México, en la entidad hasta 2017 había una población canina de 8.5 millones de perros, de los cuales 5 millones eran considerados callejeros.
“La falta de responsabilidad de los propietarios, de la sociedad, así como de las autoridades dan como resultado que al dejar en estado de indefensión a estos caninos su fatídico final sean los basureros o rellenos sanitarios después de ser sacrificados o ultimados en las mismas calles”.
Dijo que anualmente en la entidad existen entre 10 y 15 mil cadáveres de mascotas, principalmente perros que terminan en basureros clandestinos debido a la falta de recursos materiales, humanos y económicos del gobierno estatal y municipal y por el maltrato que sufren dentro de los centros de control canino, pudiendo aumentar esta cifra conservadora debido a que no hay transparencia de los municipios en relación a el número de sacrificios.
Aunque aclaró que el problema no es propio de alguno de los 29 centros de control canino que existen en la entidad, sino del interés que tienen los gobiernos para poder establecer soluciones y se les pueda brindar mejor condiciones a estos seres vivos que merecen toda la atención.
Sostuvo que el Plan Estatal de Desarrollo de la entidad no cuenta con políticas o acciones en específico para un control canino adecuado, evidenciando que en las agendas este tema no es una prioridad y se seguirá padeciendo de espacios dignos para los animales.