Toluca/Estado de México
El pleno del Tribunal del Poder Judicial estatal analiza el proyecto de conformación de un nuevo Código Penal del Estado de México, que pretende construir una política criminal integral que será complementaria de la Ley de Justicia Cívica, y que va por reducir el número de delitos penales e integrar nuevas figuras que corresponden a la realidad social, como la violencia ácida y los transfeminicidios, dijo Ricardo Sodi Cuellar, presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado de México (TSJEM).
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En entrevista, señaló que habrá foros incluyentes temáticos para analizar la propuesta; por ejemplo, la parte Geberal y dogmática con la teoría del delito, uno más sobre delitos de género, delitos contra el patrimonio y uno más sobre delitos contra la seguridad, con la idea de hacer un código más fácil de aplicar, que reúna la experiencia de los jueces, y es un ejercicio que nunca se ha intentado en México.
Apuntó que no busca hacer laxa la ley, pero insistió en que incrementar las penas no abate la comisión de delitos, pues quien sale a robar no le importa la pena en cárcel, pero mientras más elevada la sentencia, más recrudece la violencia. El problema dijo, no es de penas sino de impunidad que ocurre, porque los órganos de investigación no se dan abasto, aunado a la complejidad de acreditar los delitos.
Ejemplificó que, cuando a una persona le roban un vehículo, al llamar al seguro se arregla el problema, pero a quien le roban la quincena en el transporte público le cambian la vida y es una tragedia ese delito, porque, además, debe castigar un día para establecer la denuncia y gastar en ello, por eso, la meta es simplificar la forma de acreditar el delito.
“Vamos a hacer un planteamiento de hacerlos más fácil de acreditarce. Lo que vamos a sugerir, retirar algunas conductas del código penal y pasarlas a la ley de justicia cívica. Por ejemplo, vender bebidas alcohólicas a menores de edad, debería ser una falta administrativa que se sancione con arresto, multa; no un delito penal”, explicó.
De esta forma – abundó – sacar esos delitos penales e integrar aquellos que la sociedad exige. Por ejemplo, los ataques a quien le arrojan ácido o agua hirviendo en la cara, o con una navaja la atacan en el rostro con la intención de afectar su proyecto de vida, pues no es una persona que solo sufre lesiones y tampoco intento de homicidio o de feminicidio, sino algo mucho más grave.
Durante la inauguración del Primer Congreso Internacional De Servicios Periciales en la escuela judicial, abordó el tema y dijo que esta nueva conformación del Código Penal está basada en la experiencia de los juzgadores bajo el principio de que lo que no sirve a un juez penal, no le sirve a nadie, porque es quien debe aplicar la ley.
“Queremos construir un código penal en clave constitucional, se nos ha olvidado el artículo 14 constitucional, es la escénica de nuestro sistema jurídico, por eso no discuto si formalista o causalista, lo que será es práctico, que reduzca los aspectos arbitrarios que generan duda y opacidad en la tutela efectiva de los derechos humanos”, amplió.
Invitó a la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) y la Comisión de los Derechos Humanos estatal (CODHEM), además a todos los interesados en participar en este proceso.
Destacó que las penas las extrajeron de la justicia militar, cuál es la mayor cantidad de amparos que concede por individualización de las penas, habrá penas únicas y, a partir de ahí, un esquema de reducción gradual, porque finalmente así se hace, porque se concede el amparo al justiciable para que el juez individualice la pena y en ese momento lo que sucede es que se pone la mínima o la intermedia mínima.
“Porque 17 hipótesis para individualizar la pena son muchas, estamos replanteando esquemas en los delitos financieros para que los elementos subjetivos y otros sean más fáciles de acreditar, incorporando tipos penales que reflejan las inquietudes sociales como la violencia ácida, el feminicidio, el transfeminicidio”, apuntó.
La meta es hacer un Código incluyente y práctico para que, a partir de ahí, se construya una política criminal general para complementarlo.
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Recordó que ya fue aprobada la ley de justicia cívica, en la que participó el Poder Judicial como cabeza y para su conformación, preponderante conjuntaron dos posturas para desembocar en un proyecto de unidad aprobado por unanimidad de votos.
Esa ley va a cachar todos los tipos penales que van a ser trasladados del derecho penal al derecho administrativo sancionador, y con eso fortalecer la justicia cívica, permitiendo adelgazar el código penal porque hay delitos que no se han judicializado desde que se crearon.
“Tenemos que reflexionar respecto que la ley, tiene que ser aplicable, el fenómeno de la lenidad es la falta de eficacia en la aplicación de la ley, es uno de los principales problemas de nuestros tiempos, hagamos que la justicia sea expedita, pronta, legítima, justa y fácil, sobre todo aplicable y que la sociedad reciba el merecido reconocimiento de sus anhelos en la actividad coordinada de todos los poderes”, subrayó.