Toluca/Estado de México
Nicolás García, familiar de uno de los internos en el penal del Altiplano denunció maltrato contra los internos desde el inicio de la emergencia sanitaria, por lo que llevan cerca de cuatro meses sin agua caliente, con alimentos deficientes, maltrato y lesiones a los derechos humanos, por lo que buscan la intervención de la Comisión Internacional de los Derechos Humanos (CIDH).
Dadas estas condiciones, dijo, hay huelgas de hambre dentro del centro penitenciario y si bien rechazó que haya tortura, dijo que los internos han manifestado que no les dan cobertores, los bañan con agua fría y les dan toque con pistolas.
Estas condiciones, explicó, iniciaron en marzo, cuando inició la pandemia por Covid-19, en tanto que la huelga de hambre inició hace 20 días, siendo el 80% de la población penitenciaria quienes se encuentran en estas condiciones.
Frente a la Cámara de Diputados del Congreso del Estado de México, expresó que junto con familiares de otros internos, buscan el cese de personal directivo que en reiteradas ocasiones han incurrido en el mal manejo del centro penitenciario y permiten o fomentan los malos tratos.
“Es por parte de la directora Martha Camarena Bahena que a su antojo maneja a los directores y los custodios, quien les prohíbe la entrada a los abogados y los familiares de los internos, porque antes los defensores podían ingresar hasta cuatro veces por semana, ahora si acaso sólo acceden dos ocasiones”.
Por lo anterior, dijo que solicitan la intervención de la Comisión Internacional de los Derechos Humanos (CIDH) para que indague y enfoquen la vista a lo que ocurre ahí dentro. En especial, añadió, Alejandro Encinas, quien es el encargado de los centros penitenciarios en el gobierno federal, con la finalidad de que intervenga y apoye a los presos, pues si bien cumplen una sentencia, son seres humanos que merecen un trato digno.
Destacó que hay personas enfermas de depresión, padecimientos estomacales u otros, pero no reciben atención médica y cuando los familiares llevan alguna medicina prohíben el ingreso, aún si es para tratar hipertensión.
“La doctora que se encuentra a cargo, Delia Martínez impiden el ingreso de medicina que tampoco les proporciona el centro penitenciario, pero es bajo el argumento de que nosotros - los familiares - vamos a entrar y contagiar a los internos”.