Toluca/Estado de México
Permanecen las pancartas y las pintas en los jardines, las fachadas y los edificios públicos, las demandas que este viernes colocaron las asistentes a la marcha por el 8M en Toluca, todas señalando a sus agresores sexuales, nombres de deudores alimentarios, las demandas de justicia y la exigencia por mantenerse vivas, libres, sin miedo y poder volver a casa.
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La marcha por el Día Internacional de la Mujer en Toluca concentró a cerca de 5 mil mujeres, en ella hubo algunos conatos de bronca entre policías estatales y algunas mujeres, sobre todo del bloque negro; sin embargo, hubo un saldo blanco.
A diferencia de años pasados, han transcurrido las horas luego del 8 de marzo y las autoridades municipales no han enviado al personal para realizar la limpieza de espacios públicos. Ello permitió que la gente que acudió al centro, en el primer cuadro, leyera los mensajes, las demandas, los relatos de violencia.
“¿Nada más para eso sirven?, cuestionó una señora de la tercera edad al leer las pancartas colocadas en el perímetro de las jardineras llenas de lavandas moradas, donde una pareja de jóvenes respondió: “también para exigir que no las maten, señora”.
Las opiniones sobre la iconoclasia fueron en dos sentidos, quienes apoyaron las pintas y los que reprochan dichas expresiones, sin embargo, todos las leyeron.
En Los Portales, una de las zonas más visitadas, las pintas sobresalen en el piso, en ese espacio sí hay personal realizando el remosamiento de la pintura blanca, aunque las baldosas continúan intactas.
Lo único que retiró la autoridad fue la madera, el tapial que encendieron las feministas al término de la marcha y a modo de protesta, pues “fue más protegida la estatua de Hidalgo, que mi hija, que no volvió a casa”, dijeron algunas de las participantes a la marcha.
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