Nezahualcóyotl
Hace un año su cuerpo fue encontrado sin vida en el Bordo de Xochiaca, en la colonia El Sol, en esta localidad. Hoy, activistas, familias, amigos y vecinos recordaron a “Lupita, la niña de las calcetas rojas”, con un plantón frente a la alcaldía, donde fue colocada una cruz en su memoria.
Como se sabe, la menor tenía cuatro años de edad cuando fue asesinada a golpes por su padrastro y su progenitora en al colonia Agua Azul, en Neza, donde tenía su domicilio. Ambos están presos en el penal Neza Bordo desde el 24 de diciembre, sujetos a proceso por el delito de feminicidio.
“No la olviden, esta cruz es para eso, para que no se olvide y para que cada persona, aquellas que sabían que la niña era violentada, recuerden que pudieron haber hecho mucho por evitar lo que sucedió”, comentó la activista Frida Guerrera, quien desde el principio, al conocer el caso, se dio a la tarea de investigar la identidad de la niña y exigió el esclarecimiento del asunto, concluyendo con la detención de los presuntos autores del asesinato de la menor.
Amigos, vecinos y familiares de otras mujeres que han sido victimadas en el Estado de México en los últimos meses, realizaron un acto simbólico en honor de la pequeña de cuatro años quien, ante el abandono familiar, se alimentaba de residuos de alimentos en la basura, y en ocasiones era alimentada por una vecina, Rosa Ayala, quien procuró hacerse cargo de la menor, incluso para llevarla ante el Registro Civil porque la menor ni nombre tenía y sólo era conocida como “Lupita”.
Según las pesquisas de las autoridades, “Calcetitas Rojas” presentaba el síndrome del maltrato infantil y era atacada sexualmente por su padrastro.
En el acto en recuerdo de la menor, un ciudadano que se identificó como Íker Balderas, cantó una canción que compuso en honor a la “Niña de las Calcetitas Rojas”.
