Toluca
Alumnos de primaria, secundaria y los docentes son víctimas de la violencia desde hace “años” y debido a la falta de respuesta por parte de las autoridades municipales, además de las secretarías de Educación estatal y federal, los padres de familia de alumnos en las escuelas Primero de Mayo en Santa María Totoltepec y Gabriela Mistral, en San Pedro Totoltepec, determinaron "encerrar" a sus hijos detrás de las rejas.
La presidenta de la Asociación de Padres de Familia en la escuela “Primero de Mayo”, ubicada en Santa María Totoltepec, Mayra Yadira Bojórquez platicó que en el ciclo escolar anterior registraron 10 robos. La primera ocasión se llevaron el equipo de cómputo, de sonido, lámparas, hasta los focos de las aulas. Fue entonces que decidieron colocar herrería en puertas y salones.
Aun así, en los tres meses pasados, regresaron los asaltantes, “volaron” las chapas de las puertas y de nada valió elevar un metro la barda perimetral del colegio, puesto que le hicieron un boquete en la parte trasera de las oficinas de la Subdirección Regional y la Dirección del colegio, por donde ingresaron.
El problema es grave porque los padres identificaron a dos hombres adultos, de aproximadamente 40 años de edad, quienes “de forma constante están drogados o alcoholizados, siempre merodeando en el estacionamiento, entre la unidad habitacional y las escuelas. Son los responsables de los asaltos a 10 automóviles estacionados hace un par de semanas, propiedad de padres de familia y maestros.
“Hemos enviado oficios al ayuntamiento, a la Dirección de Seguridad Ciudadana, al Instituto Mexicano de Educación y Familia (IMEF); sin embargo, no han respondido. La patrulla viene una vez a la semana o dos al mes y es todo”.
Los vecinos de la zona refieren que no es la única escuela en estas condiciones, también en Geovillas es un problema. Ahí se ubica la “Lic. Gabriela Mistral”, en donde no hay clases desde el viernes, puesto que los daños en la estructura del colegio fueron ligeramente más severos, de modo que el plafón está tendiente a caer.
Igualmente mantienen enrejados a los niños. Cada vez que llega el fin de semana, los directivos y padres de familia deben llevarse todo lo que hay dentro de las oficinas, prevenir que en las aulas digitales se lleven lo poco que hay.
“Hemos invertido hast 100 mil pesos en adecuaciones para que los niños estén a salvo, al igual que la institución, porque nos corresponde a los padres de familia, con nuestras cuotas solventar estas medidas de seguridad”, dice la representante.
