Metepec/Estado de México
El arte de cincelar el papel china de colores con figuras alusivas a la muerte ha sobrevivido a la tecnología, según Berenice Morán Alcántara, del negocio Los Morán.
Papel que se transforma en arte para el Día de Muertos
Después de la pandemia, la gente ha optado por comprar el papel hecho a mano en lugar del elaborado con láser, ya que no solo tiene un costo hasta un 30% menor, sino que también ofrece una mayor variedad de colores, diseños y tamaños.
"La diferencia entre lo artesanal y el láser radica en el tiempo de producción. Aunque el trabajo con láser es menos detallado, ya que se realiza con máquinas, el proceso artesanal se lleva a cabo con cinceles, martillos y, en el caso de los diseños más pequeños, con navajas, lo que permite lograr más detalles. El láser ofrece solo uno o dos diseños y dos colores, mientras que en el artesanal se tienen nueve alternativas. Nosotros vendemos el papel picado ya armado, mientras que ellos no", especificó.
Noviembre es la temporada de ventas más alta para el papel picado, aunque las ventas comienzan desde septiembre. En esta época, los clientes solicitan papel picado personalizado con nombres de familiares fallecidos, logotipos de empresas y figuras específicas para adornar altares de la muerte. También se utilizan para decorar eventos como bodas, bautizos, primeras comuniones, celebraciones y aniversarios de negocios.
Todas estas condiciones han permitido a Los Morán sobrevivir a la competencia de productos chinos de menor calidad y a los producidos con láser, que se entregan más rápidamente pero son más limitados.
En un pequeño taller ubicado en Metepec, Berenice, con profesión de planificación urbana, heredó el negocio de su abuelo y su padre, quienes comenzaron esta actividad hace años después de aprender la técnica en Puebla y llevarla al Pueblo Mágico mexiquense. Allí se encuentran cerca de 50 artesanos de papel picado, la mayoría de los cuales han optado por la técnica del láser.
Berenice ha logrado mantener las ventas y recuperar a sus clientes, incluso después de la muerte de su padre durante la pandemia. Además, otros miembros de su familia se han unido al negocio. El arte del papel picado requiere tiempo, ya que implica diseñar las figuras y armar las plantillas de papel mina gris antes de mostrarlas al cliente y realizar los ajustes necesarios.
Inicialmente, estas figuras se creaban en papel craft, luego en papel ilustración y más tarde se replicaron en papel china, aunque solo se destinaban a festividades locales en su delegación, ya que son originarios de Cacalomacán en Toluca. Sin embargo, con el tiempo, el negocio familiar creció, especialmente gracias a las redes sociales. La demanda actual es muy alta, comenzando en agosto y continuando hasta noviembre.
Los diseños más solicitados son catrines, catrinas y calaveras, así como cráneos personalizados, y a menudo reciben pedidos en volúmenes de hasta 10 millares.
Berenice explicó que este trabajo es lento debido a la precisión que requiere. Cada diseño de plantilla puede llevar hasta 2 horas en su elaboración, y después se procede al cincelado de los fajos de papel de colores, lo que puede tomar uno o dos días según la cantidad solicitada.
Los Morán trabajan con diferentes materiales, como plástico, opalina y papel china, ofreciendo tamaños que van desde tiras de 7 metros con nueve papelitos, con un costo de 35 pesos, hasta tamaños de 48 centímetros por 1.40 metros, 1 pliego, ½ pliego e incluso ⅛, siendo este último el más pequeño, con precios que oscilan entre 16 pesos la docena, el más económico, y 60 pesos el ciento, además de 1 a 15 pesos por el papel picado, dependiendo del tamaño.
Para Berenice, seguir con este trabajo artesanal que su abuelo y su padre emprendieron ha sido una bendición. Su negocio ha llegado incluso a lugares como Washington, Chicago, España, Brasil, Francia y Guatemala. Ha logrado mantener a su familia gracias a la precisión de sus manos, ya que cada cincelada se traduce en un ingreso diario. Puedes ponerte en contacto con Los Morán a través de Facebook e Instagram bajo el nombre de Los Morán para cualquier consulta o contratación.
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