Toluca/Estado de México
Esperanza Arias, representante de la Red por los Derechos Sexuales y Reproductivos en el Estado de México (DDESER) informó que están trabajando con los diputados del Grupo Parlamentario de Morena en el Congreso del Estado de México para destrabar la reforma y legalizar el aborto; sin embargo, confió en que el tema se pueda discutir en comisiones en 2020.
Recordó que si bien en la entidad no hay mujeres sentenciadas o criminalizadas por practicarse un aborto, hay 38 juicios pendientes, es decir, que se analizan si serán encarcelados, de ellas tres lograron un amparo pero tienen en los antecedentes penales que se practicaron un aborto, a pesar de que demostraron que fueron espontáneos.
Especificó que las investigaciones contra las mujeres, no están claras en los Ministerios Públicos sino están basadas en información que proporcionó la enfermera en turno o el médico que atendió a la paciente, pero no aclara si se trata de abortos provocados o espontáneos.
“La mayoría de los casos los están relacionando como aborto en proceso, pero lo hacen para criminalizar a estas personas”.
Recordó que es urgente avanzar en este sentido, pues está en riesgo la vida de cientos de mujeres mexiquenses que se siguen exponiendo a prácticas irregulares para la interrupción del embarazo y anunció que el 28 de septiembre habrá una movilización desde las instalaciones del DIF hasta el centro de Toluca para “apoyar a los diputados de Morena” en la iniciativa que está detenida.
“Ya nos dijeron los coordinadores parlamentarios que será analizada y discutida en comisiones y el Pleno hasta el próximo año. Pese al trabajo que hemos realizado en todo este tiempo, la realidad es que no hay disposición de algunas fracciones parlamentarias, especialmente en la comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales”, afirmó.
A la par, expuso que identificaron que en muchos de los Centros de Salud no respetan la Norma 046 que permite a mujeres víctimas de violación interrumpir el embarazo, salvo el de Las Américas y el Hospital Mónica Pretelini, pero sí notaron apoyo para niñas de 10 a 12 años que llegan con embarazos producto de la violencia familiar y que sí reciben auxilio.
