Atlacomulco/Estado de México
Más de mil 500 familias de San Lorenzo Tlacotepec, municipio de Atlacomulco, viven de la producción de flor de Nochebuena, la cual junto con otras plantas, se comercializan en diciembre.
Exportan la flor a Estados Unidos, Canadá y otras partes del extranjero, además de llevarla a estados como Sinaloa, Monterrey, Jalisco, entre otros. Sin embargo, la mayoría coincide en que este año tuvieron pérdidas de hasta 30% en su producción debido a las lluvias atípicas que se presentaron a lo largo del año.
En esta comunidad es posible encontrar plantas con precios desde 10 pesos en maceta pequeña de plástico, hasta los 350 pesos en macetón de barro; todo depende del tamaño, color y cantidad de flores en un tallo.
“A lo largo del año nos vamos preparando para tener los tallos que nos solicitan, somos muchos quienes dependemos de esta actividad y nos preparamos para saber cultivar las plantas de todo tipo”, indicó.
Aunque es un negocio que parece sencillo, conocer los tiempos en que deben sembrar cada flor es un arte que requiere dedicación, platica la trabajadora de este sitio. Mientras acomoda las largas filas de flores rojas, rosas y hasta naranjas, señala que en esta temporada comienzan a concretar la producción que van a vender entre enero y marzo.
En esta zona, cada productor tiene entre cinco y seis invernaderos, en los cuales emplean hasta 20 personas en promedio cada uno, pues la floricultura es una actividad que permite a la localidad desarrollarse y que la ha colocado -al menos en el Valle de Toluca- entre los principales productores de plantas.
Las grandes son las más costosas y las que tienen un promedio de cinco flores, que bien cuidadas pueden durar hasta el mes de enero e incluso sobrevivir para ser plantadas en un jardín y florecer durante el siguiente invierno.
Aunque la venta de esta especie es permanente en este sitio, desde mediados de noviembre y hasta finales de diciembre, lo que más conviene a los productores es la comercialización con los intermediarios, quienes compran de mayoreo y revenden las flores al doble o triple de precio.
Desde hace 30 años, Rogelio Valencia siembra hasta 20 mil flores de temporada. Hace envíos a Sinaloa, sobre todo Mazatlán, a Chihuahua y otras entidades del norte. Cuenta que “muchas veces no conviene porque nos sale más caro el flete por la gasolina, pero tenemos que buscarle, no podemos de brazos cruzados”.
Refiere que junto con los floricultores de Tenancingo, son quienes más venden este tipo de planta en la entidad, aunque afirma que las condiciones climatológicas este año no favorecieron la producción porque hubo más lluvias que “mancharon la hoja y picaron la flor”.
El productor acepta que “hubo algo de pérdidas, por ejemplo de 10 mil plantas perdimos como 3 mil en este invernadero, pero eso fue en cada uno de los casi 500 invernaderos que hay en esta región”.