Toluca/Estado de México
Edgar Conzuelo Contreras, director general de la Protectora de Bosques, reconoció que el año pasado recibieron menos de 10 mil árboles de navidad en los 18 centros de acopio, pues muchos ciudadanos continúan dejando los árboles en la calle, también algunos ayuntamientos instalaron sus propias máquinas de reciclaje.
“Sería muy importante, que podamos permear en la ciudadanía de poder crear el ciclo bien. Si ya fuimos por el árbol, fuimos hasta Amecameca y gastamos en ir por él o a una plantación en familia, de igual manera en ese mismo núcleo irlo a depositar adecuadamente donde van a transformar un arbolito”.
En el año 2018, la Secretaría de Medio Ambiente estatal, reportó una venta estimada de 200 mil árboles, por lo que el director general consideró que quizá en enero pasado los 18 centros de acopio únicamente recibieron el 5% del total de los árboles mexiquenses vendidos.
Expresó que “vemos en las calles pasar los camiones de basura con cinco árboles colgados. Esto aparte es peligroso porque se puede caer encima de un automovilista”.
Pero sin tocar el tema de seguridad, confío en que los recolectores de basura también den disposición final adecuada a los árboles, aunque reiteró que son los ayuntamientos los únicos facultados para multar o a percibir a los ciudadanos la que abandonan sus árboles.
“Ellos también lo transforman, los recolectores de basura o quien acopie cualquier cosa lo va a transformar en algo. Nosotros un pequeño porcentaje lo entregamos a los artesanos, vamos a ver cuál le acomoda más para hacer un balero, un yoyo, un trompo, un carrito”.
El director admitió que no cuenta con un dato exacto sobre el porcentaje en que redujo el acopio de árboles, pero podría ser que “únicamente un cinco por ciento de la venta es lo que llegan a los viveros”.
Añadió que los centros de acopio están distribuidos en 17 municipios, que son Amecameca, Aculco, Atlacomulco, Villa de Allende, Valle de Bravo, Tejupilco, Texcaltitlán, Coatepec Harinas, Villa Guerrero, Ocoyoacac, Lerma, Naucalpan, Jilotzingo, Tecámac, Zinacantepec, Toluca y Metepec.
Pero los dos últimos ya cuentan con máquinas chipiadoras, para dar tratamiento a las especies recibidas y convertirlos en composta.
“La adecuada disposición cocínate en tráelo al vivero y a través de nuestros compañeros los vamos a procesar hasta hacer pequeñas fracciones de madera, a través del tiempo, combinándolo con el debido sustrato podremos producir más árboles de aquí a dos años”.
En entrevista, reconoció que si bien ya cuentan con composta de años anteriores, en el 2019 “desafortunadamente” captaron menos árboles, pues los ayuntamientos también establecieron sus centros de colecta.