Ocoyoacac/Estado de México
Debido a la demanda que tuvieron los 300 artesanos de tamales de ollita en la Feria del Tamal en Ocoyoacac que se llevó a cabo este jueves, algunos de los asistentes no encontraron uno solo. De acuerdo con los organizadores, llegaron a vender hasta 6 mil piezas de la 07:00 a las 09:00 de la mañana, lo que dejó a algunos asistentes con hambre y las ganas de comer tamales por el Día de la Candelaria, como es la tradición.
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Laura Casas, originaria de Ocoyoacac, dijo que al ser está la fecha precisa, a muchas de las artesanas les pidieron con anticipación los tamales, de manera que no pudieron llevar mucho producto a la feria.
“Mucha gente ha llegado y se molesta porque volaron. Es mucha la pena que nos da, pero es que teníamos pedidos con anticipación”, dijo la artesana.
Indicó que, en su caso, elaboró cerca de mil piezas, solo para este día, aunque recordó que son tres días de feria, en los que espera llevar hasta mil 200 tamales por día.
Explicó que luego de la pandemia, en la que se suspendieron los eventos públicos, este año están muy felices, porque hay muy buena respuesta de la gente que decidió asistir a la feria.
“En ese momento, debido a que las empresas nos compraron el producto, fue como pudimos alcanzar las ventas del 2022, la verdad fue la quinta ola y unos días antes de la feria se canceló el evento, así que nos salvaron quienes regresaron con todas las medidas sanitarias a trabajar, esas industrias y este año, es todo un éxito la venta”, comentó.
Laura indicó que, pese al alza en el precio de los insumos, que afectó directamente a esta producción, sobre todo por el costo de la hoja de maíz y la carne, pudieron vender cada pieza en 10 pesos, solo tres pesos más con respecto al año pasado.
Detalló que este año la hoja de maíz la compraron en 33 pesos un paquete y antes estaba en 26 pesos, pero al ser productores compran por mayoreo, para que salga más económico y la carne pasó de 80 a 120 pesos, por lo que deben buscar los mejores precios, para que tenga el mejor sabor su producto.
Karina Galeana, otra de las artesanas, dijo que ella elaboró 300 tamales, llegó a las 07:00 para instalarse y dos horas después se había acabado todo. “Por fortuna nos está yendo muy bien, la gente ya conoce nuestro producto que es famoso y muy rico”.
Explicó que, en su caso, realiza una carga de maíz para esta fecha, que son hasta 50 tamales, en esta ocasión vendió de rajas, mole, pepita, dulce, verde, rojo, y su familia tiene una tradición de hasta 50 años dedicada a este oficio.
