Inicia el mes naranja, las campañas para hacer conciencia sobre la violencia que se vive en contra de la mujer; lo lamentable es que sin éxito, porque cada vez son más mujeres asesinadas; cada vez son más historias de dolor que se escriben, sólo incrementa la crueldad.
Muchos presumiendo su moño naranja y vestimentas igual, haciendo alusión a su apoyo en contra de la violencia.
Empoderamos a las mujeres pero quienes ejercen violencia siguen en aumento; ahí está el gran problema que nadie ve por sus moños grandes color naranja.
En redes sociales circula una campaña; donde te cuentan las trágicas historias de mujeres, la gran mayoría asesinadas por sus parejas; al término de los relatos los hashtags; #NiUnaMenos, #BastaDeViolencia, #NoMásViolenciaMachista, #VivasNosQueremos.
Realmente relatos tristes; como el de Grettel quien fue asesinada a los 33 años; madre de dos niñas, una de 14 y otra de 8, y un chico de 7. Su ex novio le clavó unas tijeras en el cuello, porque habían terminado, debido a que su relación era violenta. Dos de sus hijos presenciaron su asesinato.
A Arantxa le quitaron la vida a los 31 años, era amante de los animales y siempre solidaria.
Trabajaba como fisioterapeuta. El pasado 4 de agosto salió a caminar y nunca regresó. La encontraron con saliva de hombre en los senos y pedazos de piel en sus uñas. Murió a causa de asfixia y ataque sexual.
Hellen, madre de dos hijas, después de casarse su relación se volvió tormentosa, pues su pareja la humillaba y golpeaba constantemente hasta que por fin la mató en febrero de este año.
Kimberly Jazmín, otra historia más de una mujer que decidió terminar con una vida de violencia, denunció a su ex pareja; sin embargo, una noche ingresó a su domicilió para darle un tiro en la cabeza, su mamá estaba con ella, resultó sólo lesionada.
María Trinidad, bailarina, cantante y dj, a los 25 años fue asesinada en la playa; unos sujetos la golperaon, la violaron y terminaron ahogándola en el mar.
Y así muchas historias más, de violencia que termina en muerte, de mujeres que han desaparecido y sus familias siguen sin encontrarlas.
Vidas arrebatadas por el odio, la intolerancia de una sociedad que vive y respira violencia que explota en muerte.
Perdón si sigo sin creer en el poder mágico del color naranja, pero ya se requiere otro tipo de remedio ante la letal realidad que se vive.
#DigitalMex
#VozDeMujer