Nuevo coma de Simplicio recibe diagnóstico telefónico a sana distancia del Doctor Complejo

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Nuevo coma de Simplicio recibe diagnóstico telefónico a sana distancia del Doctor Complejo

Jueves, 04 Junio 2020 00:10 Escrito por 
Nuevo coma de Simplicio recibe diagnóstico telefónico a sana distancia del Doctor Complejo Diálogos en el Averno

Doctor Complejo: Bueno, Clínica de Complejos, ¿quién habla?

Ángela: Doctor, habla la enfermera Ángela.

Doctor Complejo: Dígame, Ángela, ¿como sigue mi paciente Don Simplicio?

Ángela: Pues, fíjese Doctor que nuevamente entró en coma/

Doctor Complejo: Pero, ¿cómo es posible? ¿Qué, no siguió mis instrucciones, enfermera?

Ángela: Al pie de la letra, Doctor, y más allá del deber.

Doctor Complejo: Entonces, ¿cómo pudo recaer Simplicio en el coma, que ya de por sí fue un singular fenómeno multifactorial, muy complejo, prácticamente imposible de repetir?

Ángela: No sé, Doctor...

Doctor Complejo: Si usted lo cuidó bien y siguió mis instrucciones, Ángela, no pudieron repetirse las complejas circunstancias que ocasionaron el coma originalmente. Su fiebre primaveral desapareció y se redujo el stress laboral, tu amable compañía redujo la sensación de aislamiento social que produce la necesaria pero dolorosa medida de la sana distancia, suspendimos las sesiones de psicoanálisis para no abrumar a Simplicio con malos recuerdos de su pasado, que ya con la espantosa amenaza omnipresente del Covid-19 es suficiente para paralizar a cualquiera, etc. ¿Qué pudo haber pasado? ¿Algún hecho fuera de lo normal antes de que recayera en el coma?

Ángela: No sé, Doctor.

Doctor Complejo: Debe haber aparecido algún nuevo factor o complejo conjunto de factores que suscitaran este extraño comportamiento anormal, casi paranormal, de nuestro paciente. ¿Un nuevo shock psicológico o fisiológico, o la combinación de ambos? ¿Cómo lo vió antes de su recaída, Ángela?

Ángela: Fisiológicamente, Simplicio estaba recuperándose bien, pero se quejaba constantemente del calor. Y psicológicamente estaba muy alarmado por las noticias de manifestaciones de protestas y rumores de un posible Golpe de Estado contra ya sabe usted quién...

Doctor Complejo: Sí, estos del FRENA (Frente Nacional Contra AMLO) y los del Círculo Rojo que predominan en los medios de difusión ciertamente ya calentaron más el ambiente social y complicaron más las cosas. Y no hay quien los frene.

Ángela: Sí, liderados por los diablos de los Ferriz y un tal Gilberto Lozano, regiomontano para más señas, que aparecen en You Tube invitando a la dimisión de ya sabes quién.

Doctor Complejo: Y encima el calor está del carajo con eso del amenazante calentamiento global, que preocupa a cualquiera, y más a los confinados del Tercer Mundo que no tenemos aire acondicionado por lo caro que resulta la electricidad aquí en México...

Ángela: Sí, Simplicio se indignaba mucho cada vez que sabía de las noticias de todo ese enredo de la generación de electricidad en el país y los cobros desiguales por el servicio y hasta que se lo han cortado a muchos porque no tienen con qué pagar y menos cuando llegan a los pequeños consumidores unos cobros absurdamente elevados y, en cambio, no les cobran los enormes consumos a los grandotes complejos industriales.

Doctor Complejo: No es un simple enredo, Ángela, es un fenómeno muy complejo, pero tienen razón, eso sí calienta...empiezo a sospechar que a Simplicio esta nueva normalidad le provocó un nuevo coma, por causa de sus temores psicológicos de un posible Golpe de Estado, pero, ¿por qué se quejaba tanto, tanto del calor? ¿Qué pasó precisamente antes de que cayera nuevamente en el coma? ¿Alguna presencia maligna? ¿No pudo haberse contagiado del Coronavirus?

Ángela: No lo creo, aunque a veces quiere visitarlo un engendro de tipo raro que me huele mal y prefiere no entrar antes que dejarse desinfectar, pero no lo he dejado pasar. Otra cosa es que poco antes de recaer en el coma Simplicio empezó a delirar y decía que quería casarse conmigo.

Doctor Complejo: Vaya con el tortolito Don Simplicio, él en coma y tú, mosquita muerta. Tal para cual, jajaja.

Ángela: No es para reírse, Doctor. Precisamente el calor le hacía decir a Simplicio que tenía mucha sed.

Doctor Complejo: Sed...de ti, jajaja. Fueron muchas tus sexuales feromonas para su súper activa testosterona.

Ángela: !Basta, Doctor!, no se burle. Sepa que la casa ciertamente estaba muy caliente cuando llegué del peligroso supermercado, como si fuera un infierno, y Simplicio se desilusionó aún más cuando no le conseguí unas cervezas heladas que normalmente acostumbraba tomar antes de que se viniera esta epidemia del Coronavirus y decía y repetía: ¨Debí de haber aceptado el pacto de las cervezas, debí haber aceptado, debí haber aceptado, tengo mucha sed...¨.

Doctor Complejo: Entonces, ¿eso pudo ser la causa del nuevo coma, una compleja nueva combinación de sentimiento de soledad y temor a los rumores de Golpe de Estado junto con un tremendo Golpe de Calor real, provocado por la forzada abstinencia de cervezas frías, que lo sacó de su vieja y tranquila normalidad?

Ángela: No puedo imaginar otras razones, pues yo nunca le di motivos para coquetear conmigo y el paciente Simplicio, aunque impaciente por salir del confinamiento, ha estado bajo mi constante supervisión, operando bajo las medidas higiénico-sanitarias establecidas por las autoridades. Aunque ciertamente le apliqué severamente la Ley Seca y evité que tomara alcohol, en especial las cervezas que insistentemente exigía que consiguiera para él.

Doctor Complejo: ¿Cómo?

Ángela: Usted sabe, Doctor, que en muchos lugares, como medida preventiva se determinó una "Ley Seca" a fin de evitar aglomeraciones, reuniones, y violencia al interior de los domicilios de la ciudad durante el confinamiento voluntario de la Jornada Nacional de Sana Distancia. Y yo no hice sino aplicarle la Ley...nada de pachangas como las que acostumbraba, ni dentro ni fuera de casa y, por supuesto, !cero alcohol!, salvo por fuera, para desinfectarlo.

Doctor Complejo: Ay, Ángela...en esta ocasión el remedio salió peor que la enfermedad, de hecho, agravó la enfermedad...

Ángela: Entonces, ¿fue mi culpa?

Doctor Complejo: No del todo, pero ciertamente si Simplicio hubiera contado con un poco de calor humano y sus cervezas heladas, la sensación de soledad y el Golpe de Calor real no hubieran sido tan fuertes, te mandaste, Ángela. Y tal vez Simplicio hubiera reducido su compleja angustia por la diabólica situación existencial actual tan compleja, que hasta parece que el propio Diablo busca complicarla más incitando a ciudadanos que normalmente serían unos borregos apolíticos, a pensar en complejas iniciativas como blandos Golpes de Estado, al estilo que teorizaba Gene Sharp, aunque luego acababan en Golpes de Estados de plano militares.

Ángela: ¿Quién es ese Sharp?

Doctor Complejo: Ay, Ángela, se ve que no has llevado cursos de Enfermería Política...ya otro día te explicaré sobre este complejo fenómeno psicológico que se denomina golpe de Estado blando, golpe suave, golpe encubierto o golpe no tradicional, que es el complejo uso psicológico de un conjunto de técnicas no frontales y principalmente no violentas de carácter conspirativo, con el fin de desestabilizar a un gobierno y causar su caída, sin que parezca que ha sido consecuencia de la acción de otro poder anormalmente anónimo.

Ángela: !Efectivamente, eso es lo que tanto preocupaba a Simplicio, más que el mero calor ambiental. Es Usted un genio, Doctor Complejo.

Doctor Complejo: Ese es el complejo diagnóstico acertado. Por el lado fisiológico, el calor fue el factor precipitador de este nuevo complejo fenómeno del segundo coma, un tremendo Golpe de Calor, provocado fisiológicamente por la abstinencia prolongada de la ración de cervezas heladas a las que estaba acostumbrado Simplicio en su vieja normalidad. Y, por el lado psicológico, las preocupantes exhortaciones de Golpes de Estados que andan circulando en las benditas/malditas redes, especialmente las incitadas por una bola de viejos ociosos que utilizan las nuevas tecnologías digitales para intercambiar opiniones en videoconferencias colectivas como la que se descubrió recientemente precisamente por esas mismas redes...

Ángela: !Eureka! Y ahora, ¿qué hacemos, Doctor?

Doctor Complejo: Tras mi genial diagnóstico, posible gracias al manejo adecuado de la holística Teoría de la Complejidad que domino, procede acto seguido una integral Terapia Transfuncional, operada bajo las medidas higiénico-sanitarias establecidas, las cuales tienen que ser fortalecidas pues serán vigiladas y supervisadas constantemente mediante un programa de verificación para su cumplimiento, a cargo de un equipo como lo establece el Plan para el Regreso Seguro Gradual y Ordenado a las Actividades Económicas Sociales y Gubernamentales por motivo del COVID-19 de acuerdo al sistema de semáforos establecido por las autoridades federales y estatales.

Ángela: !Chispas, Doctor! No creo estar capacitada ni preparada para todo eso.

Doctor Complejo: Sí, Ángela, mucho me temo que esta compleja situación te rebasa, aunque puedes seguir colaborando en labores domésticas básicas, pero sin adoptar decisiones que rebasan tu campo de incompetencia, hasta que tomes unos cursos

Ángela: ¿Entonces, qué hago?

Doctor Complejo: Para empezar, te vas a encargar de hacerle a Simplicio una fisiológica transfusión vía sanguínea de emergencia, de CONCENTRADO DE CERVEZA BIEN FRÍA, para aplicar la teoría homeostática y reponer líquido suficiente a Simplicio para que el sudor, que es un mecanismo homeostático, permita el descenso de la temperatura corporal del caliente de nuestro amigo y le permita restablecer su equilibrio homeoestático y recuperar así la proporción alcohol/sangre de su vieja normalidad para iniciar de la mejor manera el sano retorno a la nueva normalidad y propiciar su reactivación, es decir, su despertar, en fin, que salga del segundo coma, que esperemos sea el último.

Ángela: De acuerdo, Doctor.

Doctor Complejo: Dado el coma repetido, para acelerar el proceso puedes omitir las previas pruebas pretransfusionales que normalmente se hacen antes de la transfusión de emergencia de este tipo. Esperemos a ver cómo reacciona el cuerpo de Simplicio y si su alma despierta vamos a tener que estar preparados con una buena reserva de cervezas heladas para Simplicio, aunque haya que comprarlas en el mercado negro, todas las que quiera, sin límite, durante esta etapa de regreso a la nueva normalidad. Tal vez el mayor problema es que tenga que ir seguido al baño. ¿Entendido?

Ángela: Sí, Doctor.

Doctor Complejo: Si despierta, en cuanto al lado psicológico, ya me encargaré de proporcionarle herramientas para bloquear todas esas iniciativas e incitaciones inquietantes de viejos reaccionarios en la primavera de su descontento, en el otoño de su vida, dedicados a esparcir rumores y fake news, que en gran medida son responsables de haber llevado a Simplicio a su actual inconsciencia, que esperamos temporal.

Ángela: ¿Y si no despierta?

Doctor Complejo: La situación se complicaría y ya veremos como lo resolvemos. Ánimo, tú quédate en casa, mantén tu sana distancia, no caigas en la tentación de participar en manifestaciones así sean en automóviles, ni emprendas viajes, y no salgas sino al supermercado, pero no vayas a ese super que anda metido con los viejos rebeldes sin causa en esas conspiraciones de la gerontocracia, cuando deberían estar ya en un gerontocomio.

Ángela: La cadena de supermercados a que se refiere, Doctor, ya se deslindó de esa propuesta...

Doctor Complejo: Bueno, tú ten mucho cuidado y mejor ni salgas, pide a domicilio porque esa curva de contagios no hace caso y no se aplana, ni se da por enterada de la nueva normalidad. Mantén tu sana distancia, y ni vengas a la clínica, ahí me tienes al tanto por teléfono. Al rato te mando por correo electrónico el protocolo con las instrucciones precisas y te anexo mi recibo por honorarios, pero si despierta Simplicio no se lo vayas a presentar luego luego, no vaya a recaer en coma otra vez, te esperas a darle unas cervezas y luego haces que te firme un cheque por la cantidad completa, nada de diferimientos, o que te dé la contraseña para su Banco por teléfono y así evitamos todos posibles contagios...e impagos.

Ángela: ¿Y mi sueldo, Doctor?

Doctor Complejo: Tú encárgate de lo que te dije y luego te abono a tu tarjeta de débito tu salario.

Ángela: Pues ojalá y no tarde mucho porque a mí ya me anda dando el coma, de puro hambre.

Doctor Complejo: De ti depende, chiquita, sácale los datos de la lana a Simplicio.

Ángela: Y, ¿si no despierta Simplicio?

Doctor Complejo: Entonces, sí estaremos en verdaderos problemas económicos, tú y yo.

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Javier Ortiz de Montellano

Articulista invitado