“El poder es el proceso fundamental de la sociedad, puesto que ésta se define en torno a valores e instituciones, y lo que se valora e institucionaliza está definido por relaciones de poder”, afirma Manuel Castells, en su obra, Comunicación y poder, y añade que “el poder se ejerce mediante la coacción y/o mediante la construcción de significado partiendo de los discursos a través de los cuales los actores sociales guían sus acciones”.
En ese sentido, los cambios en la normatividad y la estructura del Poder Ejecutivo de la entidad propuestos por el gobernador Alfredo Del Mazo Maza, y avalados por la LX Legislatura estatal, son un mensaje contundente de ejercicio del poder.
La relación que ha sabido construir el gobernador Del Mazo con una Legislatura controlada por la mayoría opositora a su partido, le dio el margen suficiente para arrancar la segunda mitad de su gestión con un ajuste profundo en la estructura gubernamental, con el objetivo –expresó el propio mandatario- de adaptar a la administración estatal para superar esta emergencia sanitaria.
“Este evento (la emergencia por Covid-19) nos obligó a replantearnos nuestras prioridades y encontrar nuevas formas de interacción y de trabajo, por esa razón estoy haciendo cambios en la estructura de la administración que nos permitan adaptarnos rápidamente y seguir adelante”, afirmó el gobernador, luego de tomar la protesta a quienes se incorporaron a su equipo de trabajo y a quienes asumen nuevas responsabilidades, derivadas de los ajustes a Ley Orgánica de la Administración Pública del Estado de México y a otros ordenamientos jurídicos.
Los cambios significaron la fusión de seis secretarías y la eliminación de cinco subsecretarías, así como la creación de la Secretaría de la Mujer, atendiendo a que uno de los sectores prioritarios desde el inicio de su mandato, han sido las mujeres de la entidad. La nueva dependencia –que encabeza María Isabel Sánchez Holguín- “estará encargada de garantizar el acceso igualitario a las oportunidades de empoderamiento y el ejercicio de los derechos de las mujeres”, subrayó el gobernador.
Estos ajustes –que desataron una serie de especulaciones desde el pasado lunes- tomaron a varios de los actores públicos por sorpresa y hubo otros que vieron nubladas sus expectativas, porque ya se imaginaban como titulares de algunas de las dependencias donde hubo cambios.
Este jueves, todos los medios informativos de la entidad tienen como una de sus notas principales la toma de protesta de las y los funcionarios, y muestran uno de los juegos más practicados en la política: la especulación y el futurismo. Ya empezaron a decir si uno u otro personaje será quien se convierta en candidato para la sucesión de la gubernatura en el año 2023. Mera especulación porque es muy pronto para hacer esos cálculos.
Lo que es un hecho, es que en la coyuntura provocada por el Covid-19 el gobernador ha logrado mejorar sus indicadores de aprobación. De acuerdo con Consulta Mitofsky, hasta agosto de este año, el gobernador Del Mazo había logrado incrementar en casi 10 puntos su aprobación ciudadana, al pasar de agosto de 2019 a agosto de 2020, de 23.5 por ciento a 33.3 por ciento.
Al analizar los resultados del documento Ranking Gobernadores de México [AGO 20], se observa una caída en el porcentaje de población encuestada que dijo estar de acuerdo con el trabajo del gobernador. En febrero de este año, el gobernador registró el punto más bajo con 13.3 por ciento de población que expresó estar de acuerdo con su gestión y –en el proceso de la pandemia- ha logrado incrementar en 20 punto porcentuales esa aprobación para alcanzar 33.3 por ciento. Sigue siendo bajo con respecto a otros gobernantes del país.
Es así que los ajustes realizados tienen como objetivo fortalecer esa tendencia positiva que se ha registrado en los últimos meses, a partir de una gestión mucho más eficiente y cercana a la población. También se fortalece su equipo cercano –con la designación de funcionarios que le han acompañado en su trayectoria política desde hace varios años-, y crea condiciones para su partido, con la mira puesta en el proceso electoral de 2021, por lo que algunos de los personajes que ahora “quedaron fuera”, seguramente competirán en las elecciones del próximo año para renovar los 125 ayuntamientos, las 75 diputaciones locales y las 40 diputaciones federales.
Es así que en la mitad de su gestión, el gobernador Alfredo Del Mazo envía un mensaje de fortaleza en el ejercicio pleno de su poder, que -aunque lo maneje con discreción y prudencia- le ha redituado una extraordinaria relación con el Presidente de la República y con la Legislatura, lo que le ha permitido mantener la gobernabilidad del estado.
PERCEPCIÓN
Hablando de poder y comunicación, el hecho de que el secretario general de Gobierno, Ernesto Nemer Álvarez, diera posesión a las y los titulares que rindieron protesta, es un mensaje para analizar.
Los ajustes en el Poder Ejecutivo estatal también tendrán repercusión en otros ámbitos de la vida pública mexiquense que, quizá, ahora no se perciben, pero en el corto plazo se dejarán sentir.