Para las elecciones 2021, los mexiquenses acudiremos a las urnas para renovar el Congreso del Estado de México, integrado por 45 diputados de mayoría relativa y 30 de representación proporcional. También se renovarán los 125 ayuntamientos y votaremos por 40 diputados federales de mayoría relativa.
Son muchos cargos los que estarán en juego y, por eso, este tipo de elecciones siempre llaman la atención de la ciudadanía. Todavía no queda bien claro si el presidente Andrés Manuel López Obrador estará en las boletas electorales, por el asunto aquel de la revocación del mandato, pues su nombre significaría una clara ventaja para los candidatos de Morena.
La oferta electoral puede que sea muy vasta, muy abigarrada; vaya, la ciudadanía tendrá mucho de dónde escoger. Participarán diez partidos con registro nacional: PAN, PRI, PRD, PT, PVEM, Movimiento Ciudadano y Morena, a los que se suman Encuentro Social, Fuerza Social por México y Redes Sociales Progresistas, que recién obtuvieron su registro, además de Nueva Alianza como partido estatal.
La presencia de once colores e ideologías diferentes en el abanico electoral no quiere decir que el ciudadano vaya a tener ese mismo número de opciones para elegir, porque seguramente algunos partidos, si es que pueden, acudirán coaligados o en alianza.
Es claro que desde hace tiempo los personeros de Pedro Haces Barba, Elba Esther Gordillo y Erik Flores dirigentes de los partidos Fuerza Social por México, Redes Sociales Progresistas y Encuentro Social, han estado a la pesca de líderes priistas y de otros partidos en el estado para llevarlos a sus filas.
Quienes podrían llevar candidatos propios son obviamente Morena, PAN y PRI, PVEM. Y es evidente que PRD, PT, Movimiento Ciudadano buscarán ir en alianza con otros partidos, así lo han señalado con anticipación. Nueva Alianza todavía no define. Encuentro Social, Redes Sociales Progresistas y Fuerza Social por México deben ir con candidatos propios.
A estas alturas seguramente los partidos todavía no tienen claro con quienes irán a las urnas, de ahí los jaloneos que se han visto en los últimos días prácticamente en todas las fuerzas políticas. Literalmente no se escapa nadie de esta situación, sobre todo en Morena donde muchos suponen que las candidaturas desde esa plataforma serán como un cheque en blanco.
Y eso es algo que no debe darse por hecho, los demás partidos están haciendo su trabajo para fortalecerse. Lo mismo el PAN con Jorge Inzunza y Enrique Vargas del Villar al frente, que han logrado llevar a valiosos personajes en los municipios clave.
Pero también el PRI está atento y animado con los resultados obtenidos en Coahuila. Es una bocanada de oxígeno. Alejandra Del Moral sigue con sus reuniones regionales, aunque sean virtuales cuidando el tema de la sana distancia por la pandemia, no deja a sus militantes a la deriva.
Y qué decir del Verde Ecologista, donde el activismo de Pepe Couttolenc también le ha permitido reforzar sus filas con políticos, sobre todo del PRI, que tienen peso y capital político en los municipios y con algunos valiosos operadores políticos. Lo mismo Mario Cervantes Palomino con Nueva Alianza.
De los partidos emergentes, Fuerza Social por México, a través de Miguel Mercado, Reynol Neyra, Jorge Neyra Sosa y Jorge Neyra González, han entablado compromisos con muchos actores políticos, lo que significa que van a jugar con todo en las elecciones.
El gobernador Alfredo Del Mazo Maza se juega la posibilidad de tener cierta tranquilidad para el resto de su gestión, en caso de que logre obtener por los dos principios de elección suficientes legisladores locales como para impedir la mayoría automática que ahora disfruta Morena.
En este momento eso se ve difícil. Hay muchas circunstancias y posibilidades que entrarán en juego, desde los candidatos que cada partido presente, hasta el trabajo del presidente Andrés Manuel López Obrador y del gobernador Alfredo Del Mazo Maza. Las decisiones influirán en el resultado de los comicios del próximo 6 de junio.
