La movilidad debe ser de los principales temas por atender indistintamente por los gobiernos municipal, estatal o federal, por la importancia que ésta reviste al contexto social y económico de la población y el gobierno, en especial, la que tiene que ver con las grandes ciudades, en las que se concentra un gran número de empresas y desarrollos industriales, que son vitales para la economía nacional.
Sin embargo, desplazarse de un lugar a otro para cualquier actividad, representa uno de los principales problemas cotidianos al que se enfrentan los ciudadanos todos los días, es complicado, por eso mismo representa un reto al que deben darle solución o proponer acciones encaminadas a hacerlo, los responsables de esta tarea.
En particular, en el Estado de México, la Secretaría de Movilidad, desde su creación por decreto número 360, de fecha 17 de diciembre de 2014, y que entró en vigor al día siguiente, tiene por objeto establecer las bases y directrices a las que se deberá sujetar la Administración Pública para planear, regular, gestionar y fomentar la movilidad de las personas, mediante el reconocimiento de la movilidad como un derecho humano del que goza toda persona sin importar su condición, modo o modalidad de transporte.
En consecuencia, es esta secretaría, la encargada de coordinar esfuerzos con los municipios y otras dependencias, para realizar un conjunto de acciones que tiendan a fomentar que la movilidad se encuentre al alcance de las personas que se desplazan por motivo laboral, de estudio, comercio, servicios, recreación y cultura, con especial énfasis a grupos en condición de vulnerabilidad. Por tal motivo, la Ley de Movilidad de la entidad, dispone como prioridad jerárquica para la utilización del espacio vial, al peatón, en especial a personas con discapacidad; le siguen los ciclistas, después los usuarios del servicio público, el transporte de carga, modos individuales públicos, motociclistas y finalmente otros modos particulares.
Es la coordinación con otras dependencias de gobierno, como la Secretaría de Comunicaciones, de Obra Pública, Finanzas y Seguridad en la que se debe poner mayor énfasis para transitar a la sustentabilidad, teniendo la seguridad vial como máxima del sistema integral de movilidad.
Sin embargo, sigue siendo el servicio público, el que concentra mayormente la atención de la Secretaría de Movilidad, es precisamente éste, que sigue siendo el talón de Aquiles para la autoridad, ya que los concesionarios siguen actuando como propietarios y exigen, por encima de los usuarios, la actualización del cobro de la tarifa autorizada por viaje, condición que compete al Instituto Estatal del Transporte, pero, no es lo único, el transporte público se ha adueñado de las calles, imponen condiciones y pasan por encima de quien sea, y aparentemente no tienen quien los ponga en orden.
Es precisamente el orden en donde queda a deber la autoridad, pero, ¿habrá que ordenar o reordenar al sector?
La propuesta del gobernador Alfredo del Mazo, es introducir el Mexibús para la zona de Toluca, transporte que es considerado masivo o de alta capacidad, y que en concepto es aquel que se presta en vías específicas o confinadas con capacidad de transportar a más de cien personas a la vez, lo que sin duda contribuirá a mejorar, por mucho, el servicio público de transporte.
Aunque no es suficiente, la movilidad además requiere de un uso adecuado del espacio vial, por lo que debe ser preponderante el uso de medios que sean sustentables con el medio ambiente, como es la caminata y el uso de la bicicleta; sin embargo, basta recordar que la introducción de la bicicleta pública, Huizi, no representó mayor interés por parte del actual alcalde de la ciudad de Toluca, la cual introdujo Martha Hilda González Calderón cuando fue alcaldesa, y que en esta gestión se ha dejado de impulsar, a pesar de ser del mismo partido el actual edil, lo que significa que se sigue improvisando sin darle seguimiento a los proyectos, que, baratos, no han resultado ser.
Otro de los conflictos por atender es el servicio de taxi, si bien la autoridad lleva el registro de las unidades que prestan este servicio, existen muchos más que operan clandestinamente, fuera de norma o fuera de la legalidad, como quiera llamarle, pero representan un gran peligro para usuarios y población en general, más aún los taxis conocidos como colectivos, aunque siendo sinceros, existen zonas en las que no hay otro medio de transporte, y la gente tiene necesidad de trasladarse a realizar sus actividades diarias ¿cuál seria la opción, si no puede ser ésta?
A esto debe sumarse el conflicto que representan los Ayuntamientos que en confusión de sus atribuciones, conceden permisos para sitios de taxis o bases, cuando es la autoridad estatal la única que legalmente puede hacerlo, como ejemplo se puede recordar que en Tenancingo los permisos que en su momento fueron otorgados, generó un gran problema hasta que tuvo que intervenir la secretaría para resolverlo.
En breve se espera empiece la operación del tren suburbano, que sumado al Mexibús, tendrá un repunte importante en la movilidad de la capital del Estado, y es precisamente la organización de ésta, la que impulsará a la entidad como centro logístico del país.
