Llegó en bicicleta a las puertas de Palacio Nacional. Provocó, respondió al Presidente de México y sorprendió. Se trataba de Xóchitl Gálvez. A dos meses de aquella fecha ya lideraba al Frente Amplio por México y será, a no dudarlo, candidata a la Presidencia de la República. Se nutrió de la fuerza de las mujeres que el 8 de marzo de 2020, Día Internacional de la Mujer, salimos a marchar y pintamos de morado y verde el centro de la CDMX, y muchas otras capitales en el país.
Las mujeres, entre las cuales estaba Xóchitl, marchamos por el respeto a nuestros derechos, por nuestros hijos, por menos feminicidios, vamos por seguridad y justicia. En la calle y desde el Senado alzó la voz, al igual que otras legisladoras. A partir de entonces y hasta que AMLO la difamó y ella le pidió entrar a ejercer su derecho de réplica en “la mañanera”, que las cosas se sucedieron en torno a la senadora, gracias a los comentarios del Presidente AMLO que la destapó al negarle la entrada al espacio de diálogo convertido en púlpito. Xóchitl habló y actuó como muchos quisieran hacerlo y acabó liderando a una sociedad harta, sin esperanza, empobrecida, enferma y con miedo.
No fue casual que fuera una mujer en el siglo en que las mujeres que están revolucionándolo todo con su voz, fuerza de emprendimiento, inteligencia, carisma y mucho más. Vamos, como las guerreras que han sido y son las columnas que sostienen el país.
Los tres partidos que hoy integran el Frente Amplio por México no estaban en su mejor momento, de hecho dos de ellos iban en picada, lo que ofrecía a Morena un escenario invaluable, pero oh sorpresa, la irrupción de Xóchitl Gálvez en el escenario de la comunicación y la política electoral movieron el tablero y el lugar de las fichas. Presidentes de partidos y contendientes sudaron frío. La sociedad, por fin, ya tenía a su lideresa.
La propaganda política había reunido a AMLO con Xóchitl en el espacio de la percepción. Al cerrarle las puertas de Palacio, le abría las puertas de la Presidencia y, por lo pronto, le complicaba las cosas a Claudia, a Morena, y a él mismo.
Se sabe que se contará con la ley, con la Corte, con la Ministra Lucía Piña Hernández, con la sociedad organizada, con la Ola Rosa y con el periodismo pundonoroso que existe en todos los rincones del país.
Las mujeres encabezadas por Xóchitl Gálvez al frente del país, no atrás de ningún hombre.
