En una acción ecológica inédita a nivel nacional, y ejemplo para muchos países, la presidenta municipal de Ecatepec, Azucena Cisneros Coss, encabeza el rescate de barrancas que durante décadas fueron abandonadas como basureros o drenajes de aguas negras, producto de la corrupción, para convertirlas en pulmones verdes en beneficio del medio ambiente del estado de México y para abatir los efectos del cambio climático.
Con el fin de no solo sanear barrancas sino también de fomentar la autosustentabilidad de las mismas para que permanezcan por siempre como microclimas en beneficio del Valle de México, la alcaldesa hechó a andar las brigadas de vigilancia ambiental denominadas Tlaloque, por lo que el sábado 26 de abril entregó los primeros 15 gafetes a integrantes para tal fin.
Cisneros Coss dijo ante la comunidad a la que entregó el resguardo de la barranca de La Joya: “Queremos que las barrancas se conviertan en zonas radicalmente distintas, transformadas en espacios verdes, con aguas que no sean de drenaje, porque es un mal que se hacen las comunidades al contaminar el ambiente”.
El nombre de Tlaloque se refiere a los vigilantes de Tláloc en la época prehispánica y se espera que estos hagan la hazaña de corresponsabilidad entre sociedad y gobierno para ser cuidadores de estas zonas.
En tanto en la barranca del Ehecatl, de aproximadamente ocho hectáreas, el dirigente de la asociación civil Guardianes del Ehecatl y Sierra de Guadalupe, Ángel Jaquez, dijo que, como lo ha expresado la secretaria de Medio Ambiente Alhely Rubio Arroniz, con el sentir de la gobernadora Delfina Gómez Alvarez, se rescaten también las barrancas del Ehécatl, Almárcigo Sur y la de Acuales, en Coacalco esta última, para convertirlas en áreas de valor ambiental (AVA).
*Presidente de la Fraternidad Naturista Ecologista de la Sierra de Guadalupe Mahatma Gandhi A. C. (Franature)