La próxima recesión de Estados Unidos: Escenarios posibles, peligros para México

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Publicado en Opinión

La próxima recesión de Estados Unidos: Escenarios posibles, peligros para México

Domingo, 05 Agosto 2018 09:09 Escrito por 

El sistema económico mundial parece desintegrarse gradualmente.  El economista Immanuel Wallerstein lo dijo a fines del siglo pasado: para el año 2050 el actual sistema se terminará y uno nuevo emergerá. 

Lo que significa que todavía quedan unas tres décadas de calamidades antes de que un nuevo sistema emerja. El hecho es que en su actual forma neoliberal el actual sistema está realmente desintegrándose, y eso plantea cuestiones interesantes para el largo plazo. Pero como decía otro gran economista, ¨a largo plazo, todos estaremos muertos¨, así es que concentremos nuestra atención en el marco general que a corto y mediano plazos le puede tocar vivir a México, digamos en el próximo sexenio, bajo la conducción política -ahora sí- de ya saben quién. 

Lo que suceda en Estados Unidos es sumamente importante para el mundo y en forma muy especial para México. Así es que en realidad tenemos que imaginar escenarios posibles en los que puede verse implicado nuestro país en los próximos años. 

Antes que nada, la expansión económica en Estados Unidos lleva ya 9 años basada, entre otros factores, en la inyección de enormes cantidades de circulante y bajísimas tasas de interés por parte de la Reserva Federal para salir de la Gran Recesión de 2008-2009 y, más recientemente, la reducción de impuestos que decretó el Presidente Trump le dio más aliento a la expansión y, si dura un año más, será la más larga en la historia de ese país. 

Pero la experiencia estadísticamente comprobada enseña que en algún momento se detendrá por diferentes causas posibles. La cuestión es cuándo y de qué magnitud será la próxima recesión estadounidense, lo cual es imposible de predecir. Sólo queda esbozar las amenazas más probables que pueden desencadenar la caída de la economía vecina, que ciertamente arrastraría en algún grado a la nuestra. 
Veamos muy sucintamente los posibles escenarios para los próximos años:

1.- El despeñadero en 2021

El efecto positivo de la disminución de impuestos ha impulsado la economía, pero también la inflación por lo que la Reserva Federal ha subido las tasas de interés para prevenir un sobre calentamiento de la economía (lo que ha obligado a México a subirlas, disminuyendo el ritmo del de por sí bajo crecimiento económico en nuestro país). 

El riesgo es que suban demasiado las tasas de interés y, al mismo tiempo, se teme que el efecto benéfico de la reducción de impuestos comience a desvanecerse entre el 2020 y el 2022. Ambos factores afectan la economía con retardos impredecibles que hacen difícil que las autoridades monetarias puedan prevenir tanto el sobre calentamiento de la economía y el consecuente disparo de la inflación en 2019 y 2020 (año de elección presidencial en Estados Unidos) como la posible caída después de las elecciones, en 2021 o 2022. México (y el mundo) se enfrentaría a una difícil situación, en especial porque en 2021 habría elecciones intermedias en nuestro país y tomar medidas obligadas de austeridad adicional sería muy peligroso social y políticamente, además de agravar los problemas económicos del país. 

2.- Problemas de la burbuja de la deuda

Las dos últimas recesiones en Estados Unidos empezaron con el estallido de una burbuja financiera. En 2001, el gobierno de Estados Unidos se tuvo que enfrentar a su inicio con el estallar de la burbuja de las acciones de empresas de internet (en México, le tocó al gobierno de Fox encarar las repercusiones que, afortunadamente, no fueron tan graves ni para la economía de Estados Unidos ni de México, pero que en este caso provocó un fuerte aumento de la deuda interna del sector público pese al elevado ingreso por exportaciones de petróleo). 

En 2008, se dio el gran estallido de la burbuja hipotecaria y financiera, que resultó una gran crisis financiera y trajo una gran recesión (en México, le toco a Calderón lidiar con las consecuencias del grave problema, en gran medida recurriendo nuevamente a más deuda interna pero también externa).

En el periodo 2012-2018 no se vivió una crisis financiera ni en Estados Unidos ni en México. Pero la caída en los ingresos petroleros en México se enfrentó duplicando la  deuda interna del sector público y la baja en las tasas de interés en Estados Unidos propició la contratación de más deuda externa.  La deuda externa del sector privado mexicano también creció enormemente.

El peligro para el futuro es la gran deuda de las compañías, estimulada por las bajas tasas de interés.  En Estados Unidos esta deuda se elevó de representar 16 por ciento del producto interno bruto al 25 por ciento, entre 2007 y 2017. Deuda que se ha utilizado en gran parte para recomprar acciones de las propias compañías, creando un nuevo auge bursátil. 

La deuda pública y privada en general en el mundo también ha crecido y se puede volver nuevamente una amenaza a medida que suban las tasas de interés (Argentina es un ejemplo reciente, que ha tenido que pedir ayuda al Fondo Monetario Internacional).

3.- La guerra comercial 

Este factor no le pega tanto a Estados Unidos como para causarle una recesión, pero sí tiene un efecto negativo sobre la confianza de los inversionistas y puede afectar más a otros países como México (de hecho ya está debilitando el crecimiento económico por la incertidumbre en las renegociaciones del Tratado de Libre Comercio con Norteamérica).

El peligro es que la guerra comercial escale a nivel mundial y cause una disminución en el ritmo de la economía global que afecte las ventas de compañías americanas y de otros países y provoque una caída en las bolsas de valores y dificultades financieras para empresas y bancos. 

4.- Guerra (s)

De consecuencias impredecibles...

5.- Cisne Negro

Usted recuerda el famoso libro de Nassim Nicholas Taleb El Cisne Negro, El impacto de lo altamente improbable, publicado en 2007, un año antes de que apareciera el Cisne Negro de la Gran Recesión mundial en 2008.

Antes del descubrimiento de Australia, en el Viejo Mundo se creía que todos los cisnes eran blancos. Parecía una creencia irrefutable. Pero, entonces, se vio que en Australia los cisnes también podían ser negros.

Taleb utiliza esto para ilustrar que El Cisne Negro es un suceso que se caracteriza por ser raro, fuera de las expectativas normales y que produce un impacto tremendo, como sucedió con el estallido de la crisis bancaria, bursátil y en general financiera que sólo unos cuantos vieron venir y lograron advertir aunque sin lograr evitarla.

El próximo gobierno de México heredará esta difícil situación externa, que se añadirá en algún momento a los agravados problemas internos en las finanzas públicas y el bajo crecimiento en que se halla estancado el país, que repercute en falta de empleos, pobreza y creciente criminalidad.

¿Qué Cisne Negro puede aparecer en los próximos años? Por definición, es algo que no se alcanza a ver, pero cuyas fatales semillas ya han sido sembradas y brotará su venenoso fruto cuando menos se le espere. Ojalá no fuera así, pero más vale precaverse.

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Javier Ortiz de Montellano

Articulista invitado