Toluca/Estado de México
El actual gobierno que encabeza Andrés Manuel López Obrador, tiene muy buena narrativa, pero muy pocos resultados, lo cual queda demostrado con los 8 millones más de pobres que hay en nuestro país, además de los 600 mil muertos y 15 millones de mexicanos que se quedaron sin acceso a la salud.
Así lo narró en entrevista Enrique Octavio de la Madrid Cordero, politólogo mexicano y exsecretario de Turismo en la administración del expresidente Enrique Peña Nieto.
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Actualmente director del Centro para el Futuro de las Ciudades del Tecnológico de Monterrey, De la Madrid Cordero señaló que por un lado se observa un país con enormes oportunidades, pero que se está corriendo el riesgo de dejarse pasar.
“México no va a prosperar si se toman medidas equivocadas. Veo grandes riesgos de retroceso”, aseguró.
Expuso que en este país no se respetan las leyes, ni tampoco se crece al ritmo que se necesita para mejorar el nivel de vida de la gente.
A su consideración, México puede tener grandes oportunidades debido al conflicto EE.UU. vs China, que va a significar que muchas inversiones americanas, europeas, e incluso chinas se desplacen a Norteamérica y muchas de esas inversiones podrían llegar a México, pero para que eso pase, el país necesita respetar el estado de derecho.
“Las inversiones nuevas no van a llegar a México si no se respetan las inversiones existentes, si esos inversionistas tienen incertidumbre sobre el respeto a sus reglas, y eso es lo que está pasando en México”.
Un ejemplo claro, dijo, son las energías renovables.
“Es claro que hay una crisis de cambio climático en el mundo, donde frente a la renovación de las energías fósiles a las energías renovables el gobierno federal quiere ir para atrás”.
Planteó que para aprovechar estas oportunidades, se requiere de un país que tenga certeza jurídica, se debe respetar el estado de derecho y fortalecer la cultura de la legalidad, poniendo el ejemplo desde arriba.
Destacó la importancia de que los mexicanos empecemos a diferenciar entre la retórica y la realidad. Entre una gran comunicación y una mala gestión como la que se enfrenta hoy en día.
“En México se suman ahora hasta 5 y 6 crisis, lo que se puede respaldar con cifras oficiales, el primer año crecimos 0%, cuando no había pandemia, y en la pandemia -8.5%, y este año, si nos va bien crecemos 6%; quiere decir que si se suma el crecimiento de estos tres años el resultado es negativo”.
En lo que se refiere a la crisis de seguridad, agregó que en los tres primeros años de esta administración suman 100 mil muertos, mientras que en la tan criticada administración del presidente Calderón fueron poco más de treinta mil, en tanto que la crisis de Salud, acumuló 600 mil muertos.
“No fue el Covid, fue la manera de enfrentar el Covid".
La crisis de educación, narró, se refiere a aquellos que no tienen acceso a internet, y tampoco hay una propuesta educativa; en tanto que en general, reiteró, hasta ahora suman 8 millones más de pobres, 600 mil muertos y 15 millones de mexicanos que se quedaron sin acceso a la salud.
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Precisó que suman 6.3 millones de ciudadanos de la clase media que cayeron en la pobreza y no descartó que los números incrementen, ya que “una economía que no genera confianza, no genera inversión”.
Recordó que, gracias a la participación de los ciudadanos, en las pasadas elecciones se logró evitar una mayoría calificada, aunque, opinó que pudo haber mejores resultados y espera que en las próximas elecciones haya mayor coordinación, mejores candidatos y candidatas y, sobre todo, una mejor narrativa.
“Yo espero que los mexicanos tengamos capacidad de reaccionar y si no, lamentablemente vamos a estar peor y lo van a pagar más los que menos tienen”.
“Los mexicanos tenemos que aprender a diferenciar entre la percepción y la realidad, no te comes la percepción, no llevas la percepción a tu mesa, no te desarrollas como joven con una percepción, eso no te da, y lo triste es que en algún momento la percepción y la realidad se juntan, la cosa es que nos dé tiempo y no cuando se junten ya sea muy tarde, pero en resultados como país vamos para atrás, ahí están las cifras y éstas son oficiales”.
Al cuestionar sus aspiraciones más concretas, afirmó que es contribuir a esta narrativa y a un correcto mensaje.
“Si este mensaje tiene receptividad, pues entonces ya puede uno pensar en aspiraciones; si no tiene, no. Si los mexicanos están felices como están, uno no tiene nada que hacer”, finalizó.
