Toluca/Estado de México
"México es un país extraordinariamente peligroso para ejercer el periodismo y cualquier señal de ataque, vulnerabilidad u hostilidad que venga de cualquier poder público, en cualquier nivel de gobierno hacia el ejercicio de la función periodística, debe ser reprobado", consideró Miguel Carbonell, abogado constitucionalista e investigador de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
El periodismo y la mirada puesta en la búsqueda de justicia
Al impartir su conferencia magistral Retos y Fortalezas en la Defensa de los Derechos Humanos desde los Órganos No Jurisdiccionales, en el marco del 29 aniversario de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México (Codhem), destacó la importancia del periodismo en la sociedad e indicó que actualmente no se necesitan a gobernantes que le falten al respeto a los periodistas, ni a periodistas que aplaudan al poder, sino apoyarlos para evitar tener una sociedad menos informada.
"Hoy no necesitamos a gobernantes que le falten al respeto, insultando, agraviando y discutiendo con los periodistas. Necesitamos un periodismo que se sienta cuidado, cobijado, protegido, un periodismo que se ejerza con libertad porque, cuando el periodismo se hace en libertad hay reportajes que incomodan al poder, pero si no es así para qué queremos periodistas".
Reiteró que, el periodismo que la sociedad reprueba es el que le aplaude y está en la nómina del Poder, por ello, resaltó que las democracias necesitan un periodismo libre, sin amenazas, que lleve a cabo y a profundidad la discusión pública, "le guste a quien le guste y si hay excesos, están las vías legales".
Por lo anterior, reiteró que se necesita apoyar a los periodistas cuya vida corre peligro, porque "cada vez que matan a un periodista vulneran nuestra libertad de expresión y porque es una sociedad menos informada, donde el propio periodismo se va a querer auto restringir, no va a querer entrar en ciertos temas o dar ciertas noticias para proteger la vida, como lo haría cualquier persona".