Toluca/Estado de México
Janeth Estadilla Martínez, esposa del comisario José Luis Zúñiga Archundia, aprehendido el pasado viernes 18 de junio por los delitos contra el correcto funcionamiento de las Instituciones de Seguridad Pública por supuestamente filtrar información a células delictivas, acudió a la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) para pedirle al fiscal general, Alejandro Gómez Sánchez, que le permita ver a su esposo internado en el penal de Otumba.
El domingo, la institución dio a conocer que el ex comisario de Seguridad de Valle de Bravo fue aprehendido bajo la hipótesis de proporcionar información de actividades y operativos de Instituciones de Seguridad y la agravante de ser cometido por servidores públicos de Instituciones de Seguridad.
Este miércoles, llegaron a la explanada de la Fiscalía en el municipio de Toluca, un grupo de amigos y familiares del ex comisario, encabezados por su esposa. En el lugar, la señora y sus dos hijos de dos y nueve años de edad portaban una imagen del expolicía.
Estadilla Martínez dijo que el viernes pasado su esposo recibió una llamada del fiscal de Valle de Bravo, para pedirle que se presentara a las 13:00 horas a una comparecencia, pero ya lo estaban esperando hombres en cuatro convoyes, quienes lo esposaron.
Refirió que el ex comisario de Seguridad Pública municipal tenía 20 años desempeñándose como elemento de la Secretaría de Seguridad, y que su familia se dedica al campo para vivir.
Señaló que el 21 de junio a las 18:00 horas le llamó para notificarle lo ocurrido y le dijo que ya se había presentado a la primera audiencia, para la que le asignaron un defensor de oficio y le pidieron que "consiga un buen abogado".
Agregó que a su esposo lo han amenazado, y que cuando habló con él recientemente lo escuchó "muy mal, pero fue muy breve lo que pudo hablar conmigo, solo dijo que estaba ahí porque lo acusan de pasar información a un cártel".
Aseguró que José Luis es una persona intachable, con buena reputación, y ha llegado hasta donde podía llegar solo por su trabajo, pues formó parte de la Secretaría de Seguridad estatal y "nunca permitió los violadores, incluso tuvo roces con jefes superiores por no recibir dinero".
Añadió que pasó los exámenes de control y confianza, aunado a que en años pasados, debido a que no se prestó a la corrupción y contubernio con el crimen organizado, fue amagado.
"Él estaba haciendo lo mejor, poniendo a trabajar a sus elementos y hasta donde considero, la delincuencia bajó (en Valle de Bravo)", dijo.
Por lo anterior, le pidió al fiscal una cita, para que le explique por que motivo su esposo fue enviado al penal de Otumba y pedirle que lo investigue, que rastree información porque aseguró que no son personas de lujos, pues se dedican al campo para tener dinero extra.
Añadió que tienen su domicilio en Jilotepec y sus hijos acuden a escuelas públicas, porque viven al día.