Toluca/Estado de México
En el Estado de México, desde el 10 de marzo el Instituto de Salud del Estado de México (ISEM) implementó el operativo Temporada de Calor 2022-2023 que comienza en la última semana de marzo y se extiende hasta la última semana de octubre y debido a que el Sistema Meteorológico Nacional (SMN) ya había reportado sobre las olas de calor, la Secretaría de Salud se preparó en todos los centros de salud y hospitales para difundir a través del área de prevención y promoción de la salud las medidas preventivas derivado de los cambios de temperatura.
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Israel Bobadilla Castañeda médico de apoyo en el área de promoción y prevención de las enfermedades en el departamento de promoción de la salud explicó que en esta temporada aumentan en 30% el número de personas con padecimientos relacionados con las altas temperaturas; sin embargo, aclaró que hasta el momento, no se han presentado datos sobre golpes de calor en la entidad.
Por tanto, el ISEM busca prevenir y controlar enfermedades diarréicas, cólera, golpes de calor, insolación y quemaduras, sobre todo en menores de 5 años y adultos mayores.
Dijo que en esta temporada, la gente presenta comportamientos que los deja vulnerables a ciertos padecimientos, como es la ingesta de agua que conlleva la toma de hielo o bebidas azucaradas de manera general, alimentos de riesgo como son ensaladas y frutas, sobre todo adquiridos en la calle en puestos ambulantes, que ponen en riesgo la salud por la falta de higiene, así como, la facilidad de descomposición de los alimentos en mariscos y pescados.
“Las enfermedades diarréicas son bichitos, bacterias, parásitos y virus que llegan en el agua o alimentos sucios, que afectan el buen funcionamiento del aparato digestivo, lo que provoca un aumento en las evacuaciones. Por eso es muy importante esta estrategia que aprendimos en la pandemia del lavado de manos, antes de comer, después de ir al baño, antes de preparar los alimentos”, comentó.
Subrayó que sobre todo menores de cinco años y adultos mayores, es vital que beban agua hervida o clorada, además tener sobres de suero oral en casa para cuando se presenten estos golpes de calor. Enfatizó la importancia de que las bebidas sean sobre todo agua simple.
Los signos de alarma son: tener mucha sed, evacuaciones líquidas y frecuentes de tres a cinco en un día, fiebre de hasta 40 grados, vómito, un cuadro que de presentarse de manera inmediata la gente de acudir de emergencia a un centro de salud u hospital. Otras enfermedades son calambres, lesiones térmicas, quemaduras solar, agotamiento por calor, insolación.
Se recomienda, dijo, beber agua hervida o clorada. Por cada grupo de edad, la toma de líquidos va de cuatro vasos en menores de cinco años, de cuatro a seis vasos en adultos jóvenes y de seis hasta ocho vasos los más grandes. El sobre de suero o electrolitos se sugiere cuando la persona tiene rasgos de deshidratación, labios secos, llora sin lágrimas, piel pegajosa o no hay sudor.
El golpe de calor se identifica cuando la temperatura de 37 grados que es normal pasa a los 40 grados, cuando ya se considera una emergencia médica, se siente la piel caliente, el pulso débil, personas compungidas, con pérdida de conocimiento y que el cuadro puede llevar hasta las convulsiones, respiración agitada y superficial o no presenta sudoración.
Por tanto, dijo que entre los alimentos no se recomienda consumir café, caldo de pollo, productos o bebidas calientes, azucaradas, alcohol, porque provocan la dilatación de las arterias y baja la presión.
