Antoine Verlay, policía terco y un poco iracundo, un hombre irreverente que pierde su lugar en la policía de París debido a problemas de insubordinación, pero entra en la Oficina Central de la lucha contra el tráfico de Bienes Culturales, gracias a la influencia del comandante Pardo, su amigo que, como resultado de este movimiento, se convierte en su jefe.
Investigador excelente, pero inculto, Antoine va a tener que formar equipo con Florence Chassagne, destacada historiadora del arte con una imaginación desbordante -que sufre vértigos porque padece de agorafobia-, para tratar de resolver casos de robos de pinturas como el de la Mona Lisa desnuda. Más allá de sólo la resolución de los casos, el dúo detectivesco se asomará a un pasaje lleno de secretos sobre la historia francesa.
Esta serie televisiva de género policiaco nos da un repaso cultural interesante y profundo acerca de algunos enigmas no resueltos, mitos y leyendas populares en torno a importantes artistas y sus creaciones.
Un episodio de la serie trata de un crimen que tiene que ver con una posible pintura de Leonardo Da Vinci, conocida como la Monna Vanna o Mona Vana (Mona como abreviación de Madona y Lisa por Lisa Gherardini, posible modelo también para la Madona Vana, que puede traducirse por la Señora Vana o Vanidosa).
El tema está tomado de un hecho de la vida real, pues los expertos del Louvre creen que Leonardo da Vinci pudo pintar este boceto de la Mona Lisa desnuda. Los conocedores destacan su calidad y creen que podría haber sido un trabajo preparatorio para pintar luego al óleo a la famosa Mona Lisa (ya plenamente vestida). La obra, cuyas manos y rostro son prácticamente idénticos, es patrimonio francés y se encuentra en el museo Conde, en el palacio de Chantilly. Las autoridades esperan asegurar su autoría para el 500 aniversario de la muerte del artista, el 2 de mayo del 2019.
Esta Monna Vanna, conocida también como 'La Gioconda desnuda' y de la que hay varias versiones, ha sido en su representación más popular considerada un trabajo originado en el taller de Leonardo Da Vinci, probablemente por el jovencito Andrea Salai, uno de los discípulos aventajados del gran maestro (y supuesto amante).
La última teoría apunta a que la versión elaborada en carboncillo, que se expone en el museo Conde en el palacio de Chantilly, al norte de Francia, podría haber salido de la mano de Leonardo da Vinci, al menos en parte. De hecho, cuando el Duque de Aumale lo adquirió por 7.000 francos en 1862, una cifra muy elevada para la época, se le atribuía a Leonardo.
En fin, en la serie francesa de TV, además de entretenerse con el obstinado policía que debe resolver crímenes como el cometido en los jardines del castillo de Amboise, nos entera de temas interesantes de la historia del arte mediante la búsqueda de la historiadora Florence que se centra en la trama artística que hay detrás de estos casos y de otros aspectos como el del grandioso y misterioso pintor florentino, Leonardo Da Vinci, que además de vida pública y privada, tenía su vida íntima y hasta clandestina.
Muy recomendable.
(Noviembre 2018)
