Los mexicanos escucharon el 4º Informe de Gobierno del Presidente López Obrador con miedo: a la violencia, al desempleo, a la pérdida de su patrimonio, del poder adquisitivo, al cierre de sus negocios, al desabasto de medicinas, en suma, a la incertidumbre que viven día a día.
En Seguridad la incidencia delictiva en el sexenio alcanzó 7 millones 355 mil 450 delitos de todo tipo, más del 20 por ciento que el sexenio anterior en el mismo periodo, entre ellos 3 mil 502 feminicidios y 35 mil desaparecidos.
En Salud 15.6 millones de personas no tienen acceso a los servicios de salud pública, somos el quinto país con más muertes por Covid (más de 500 mil) según datos oficiales, recetas no surtidas por el sistema de salud pública, más de 43 millones en tres años. En lo que va del sexenio han muerto por cáncer casi 3 mil niños por falta de quimioterapias y atención médica en los servicios públicos, y faltan por vacunar contra el Covid más de 2 millones 72 mil niños.
En Economía el PIB ha caído 2.5 en promedio en 3 años, la deuda pública se incrementó en un 31 por ciento (2.1 billones de pesos), la inversión extranjera ha caído un 12 por ciento en promedio, y la recaudación tributaria en 2022 cayó el 9.4 por ciento respecto de 2021. La CEPAL ha proyectado que para 2022 habrá 6.4 millones más de personas en pobreza; un 33 por ciento de la población económicamente activa vive con un salario mínimo al día o menos; la inflación acumulada en el sexenio es de 19.34 por ciento, la canasta alimentaria básica urbana se ha incrementado en un 31.7 por ciento; la rural en 40.76 por ciento.
En Educación más de 872 mil estudiantes de todos los niveles están en rezago educativo, 19.2 por ciento más que en 2018; de 2020 a 2021, 815 mil 714 alumnos abandonaron la escuela de educación básica de la matricula inscrita; durante 2022 la SEP ha ejercido el 13.8 por ciento menos del presupuesto programado para educación, 15.7 millones de estudiantes menores a 22 años no asisten a la escuela, de éstos 7.2 millones corresponden a educación básica, 1.1 millones a educación media superior y 6.8 millones a educación superior, datos que determinan su futuro, el que pudiera ser el crimen organizado, el gran empleador.
