¿A dónde están los actores políticos que deberían impulsar la alianza representada por la candidata emanada del PRI al gobierno del Estado de México? Alejandra del Moral, aparece en diversos actos con la propaganda identificada como “Valiente”, sin el impacto esperado. Sin embargo, lo que ha dejado ver, no parece ser suficiente como para enfrentar con éxito a la coalición encabezada por Morena.
Tal vez sea por lo antes mencionado, o porque la nube viene muy cargada; Horacio Duarte como responsable de la campaña de la maestra Delfina Gómez Álvarez, no oculta que dispone de lo necesario para proyectar a la candidata que por segunda ocasión buscará conquistar la silla del ejecutivo estatal.
No obstante, en el equipo de campaña de la maestra Delfina presumen en exceso de una holgada ventaja, según varias empresas dedicadas a medir las encuestas, aunque éstas pueden estar o no, hechas a la medida. Aun dejando de lado la sospecha señalada, la texcocana lleva ventaja sobre Alejandra del Moral, la cómoda posición que le ofreció ser coordinadora de los Programas del Bienestar del gobierno federal, y como titular de la Secretaría de Educación Pública, la colocan en inmejorable posición, aunque aún no parece definitiva, pues tiene varios aspectos que tendrá que salvar; como los señalamientos, que no son poca cosa, de haber retenido parte del salario a los trabajadores del ayuntamiento de Texcoco, cuando fue presidente municipal.
Ante tal escenario, y si la coalición Va por México cree que apoyándose únicamente en exhibir el comportamiento sancionado de la maestra Delfina, por el tema de los salarios, y con eso va a superarla en preferencias, se encuentran en un grave y fatídico error, pues no puede ser que crean que les alcance; se encuentran en gran desventaja, aunque los números dicen que ha mejorado la imagen de su candidata, no aparece muy competitiva por el momento.
Por lo anterior, es de llamar la atención que el primer priista del Estado y aún gobernador, Alfredo del Mazo, pinta su raya y deja entrever que no se meterá mucho en lo que tiene que ver con el proceso electoral; no es necesario revisar cada una de sus apariciones en los eventos que encabeza el mandatario estatal, los hechos hablan por sí solos.
Por otro lado, siendo Alejandra del Moral priista, tendría que preocuparse por el problema que representa el hecho de que existen grupos que aún no están del todo convencidos por defender a “su” candidata, además, no son pocos los que aún reprochan abandono por elecciones pasadas, incluyendo sí, las del 2021, ¿por qué habrían de suponer en el PRI que trabajarán como de costumbre, a puras promesas y sin recursos?
El PRI estatal tendrá que hacer mucho más de lo que ha hecho hasta hoy para ganar la voluntad de los ciudadanos, por lo que deberían empezar por despojarse de poses y soberbia que nada bueno les dejan, y buscar mejores condiciones para proyectar la candidatura de Alejandra del Moral, para eso, serviría de mucho que mostraran unidad, pues es fundamental para sacar adelante la contienda electoral, pero además, valorando a los que han dejado al instituto, no les quedaría de otra que buscarlos y apapacharlos, pues representan trabajo de campo del que tanto necesitan en estos momentos.
Es importante también, que los políticos que forman parte de la alianza Va por el Estado de México, integrada por los partidos Acción Nacional, Revolucionario Institucional, de la Revolución Democrática y Nueva Alianza se involucren de lleno, para demostrar que es efectiva la alianza; por lo que Enrique Vargas del Villar, Omar Ortega, Mario Alberto Cervantes Palomino y demás importantes cuadros reconocidos, aparezcan para proyectar esa candidatura común.
De no hacerlo, la campaña innegablemente irá a menos. Las cosas no han mejorado sustancialmente, porque a estas alturas ya tendría que empezar a reducirse la distancia de aceptación entre las contendientes, pero no es así, y la propuesta emprendida en el Revolucionario Institucional para empujar a la candidata como “Valiente”, no convence francamente que esté rindiendo muchos frutos.
No prende la priista, y de esta forma, sumando el alejamiento del gobernador, así como de los partidos involucrados y peor aún, con la ausencia de los líderes del tricolor que han demostrado fortaleza en otras elecciones, la competencia más parecerá un día de campo para la morenista.
Cualquiera pensaría que, dada la importancia del Estado de México, en este momento ya se estaría proyectando un empuje inédito de todos los asociados a la coalición, trazando un gran plan de alcances históricos en defensa de la última fortaleza, antes de ver el apoderamiento de todos los espacios en disputa por parte del partido del presidente Andrés López Obrador.
¿Cuál es la estrategia que implementarán en la alianza para sumar puntos en favor de Alejandra del Moral?
Los comicios se encuentran a la vuelta de la esquina, las precampañas son apenas un preámbulo, aún falta por conocer cómo presentarán las ideas que serán el sustento para convencer a los más de 12 millones de votantes con los que cuenta el Estado de México.
La estrategia que cada quien utilice será fundamental; el Estado de México representa un banco de votos nada despreciable para las aspiraciones por la conquista de la presidencia de la República, que se disputará solo un año después, por lo que la elección en tierras mexiquenses puede ser definitorio.
Se ha insistido únicamente en mencionar a las dos contendientes citadas, de las dos fuerzas con posibilidades reales de conquistar el cargo de titular del ejecutivo estatal mexiquense, aunque Movimiento Ciudadano le apuesta al senador Juan Zepeda, la tiene más complicada en solitario, por lo que no son pocos los que presumen que tarde que temprano terminará por declinar en favor de alguna de las candidatas mencionadas.
La maestra Delfina Gómez va en la delantera, y a pesar del exceso de confianza que se respira en su equipo de campaña, y de los muchos peros que pueda guardar en su pasado, no hay nada por el momento que le pueda causar mucha inquietud.