Sin duda, fue un gran paso el que se dio con la despenalización del aborto en el Estado de México. Mi reconocimiento a las mujeres que hace décadas han luchado para lograrlo. Pero hoy, especialmente, a las diputadas que lograron hacerlo posible. Que se enfrentaron, ahí, en el Congreso local, todavía a muchas resistencias machistas, de doble moral, Políticas, de credo y quizá muy pocas de convicciones.
Porque vimos a varios integrantes de un Partido Verde que ni siquiera se atrevieron a votar, no todas y todos los integrantes de la fracción parlamentaria, porque algunas de sus mujeres también pelearon férreamente por defender el derecho humano de las mujeres a decidir sobre su cuerpo.
¿Por qué comento el asunto? Soy muy respetuosa de las convicciones personales, pero no se les debe olvidar que ellos y ellas son representantes populares. El Verde incluso tiene una campaña permanente que aplica en todos los procesos electorales: Pena de muerte para algún tipo de delincuentes. Entonces, ¿sí o no a favor de la vida?
Las y los legisladores del Partido Acción Nacional siempre han mantenido su postura respecto al tema del aborto. Hay quienes, al paso de los años, han manifestado en corto su posición personal a favor, pero su instituto político siempre se ha mantenido en la postura de no y se debe respetar por quienes votaron por ellos, porque, precisamente por ello, muchos dan el voto al PAN.
Donde se encontraron muchas resistencias fue entre los propios hombres, pero al fin y al cabo tuvieron que ceder ante lo que era ya una deuda social con las mujeres. No veo un sólo hombre señalado, encarcelado, sancionado por haberle pedido a su novia, concubina o esposa que abortara.
Tampoco he visto a ninguno que haya abandonado a su suerte a la mujer con el producto (me refiero así antes de las 12 semanas), cuando está embarazada o cuando ha nacido el bebé. Nadie que recuerde.
¿Pero qué tal que en Querétaro hasta el abusador quería que una niña le pagara por haber “abortado a su hijo”? Verdaderamente no tienen vergüenza. Y el gobernador y el fiscal secundando esa barrabasada. Tuvo que intervenir la presidenta Claudia Sheinbaum para evitar una verdadera injusticia.
Alguien debe meter las manos allá. ¿Dónde están sus legisladores y legisladoras? Debe terminar el abuso contra las niñas y las mujeres en general, porque para los acosadores y violadores, sus leyes son muy laxas.
Afortunadamente, en el Estado de México ya hay un avance importante: despenalizaron él aborto, que, desde una perspectiva de derechos humanos, es un paso inicial para eliminar barreras legales que perpetúan la discriminación y criminalización de las mujeres.
Pero… la interrupción legal del embarazo es un avance más significativo, pues asegura que el ejercicio de este derecho sea real y accesible, en línea con las obligaciones de México bajo tratados internacionales como la CEDAW y la Convención de Belém do Pará.
En palabras simples, representa que cuando llegue a un hospital, la mujer no tenga problemas para ser atendida. Para eso, todavía falta un poco, pero se espera que las y los diputados lo aterricen y sea una realidad integral en el Estado de México.