Toluca/Estado de México
Al menos dos mil niños, hijos de trabajadores de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx), recibirán una nueva dosis de refuerzo contra el COVID-19. Padres y madres de familia se sienten agradecidos y felices, mientras que los niños aún derraman algunas lágrimas; dicen que les brinda tranquilidad recibir otra dosis contra el SARS-CoV-2.
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Erika Beatriz García Aguirre es trabajadora de la institución y esta mañana llevó a su hija a recibir la segunda dosis de la vacuna; el año pasado le aplicaron la primera. Además, pudo llevar por primera vez al más pequeño.
“Es un gran beneficio que nos está otorgando la universidad al poder contar con la vacuna, sobre todo para nuestros hijos y que nuestras autoridades piensen en nuestra familia es algo que merece reconocimiento”, consideró.
Comentó que en casa, ella y su esposo se contagiaron dos veces; afortunadamente, mientras ellos pasaron por la enfermedad, sus hijos no lo hicieron. Sin embargo, los casos de COVID parecen estar regresando, lo que preocupa a la mayoría de los adultos, ya que el regreso a las aulas es al 100%.
“Siempre se viven tiempos angustiosos y la verdad es que saber que tienen la vacuna, que no va a pasar nada, es una tranquilidad porque ellos son muy pequeños para pasar por este cuadro tan duro”, comentó.
Beatriz opinó que aprendió mucho durante la pandemia, especialmente en cuanto a los cuidados para evitar los contagios, ya que se siguen aplicando ciertos protocolos importantes, no solo para prevenir el contagio por COVID, sino en cuestiones de salud en general.
Natalia tiene 9 años y esta es la segunda vacuna que recibe. Lo hizo sonriente y feliz por la inyección, aunque tomada de la mano de su mamá, por si acaso los nervios la traicionaban.
“Protejo mi salud para no enfermarme. Gracias a la vacuna, los contagios de COVID se han reducido en el mundo y así todos nos protegemos. El mundo está más seguro. Ya no queremos estar de regreso en casa, encerrados”, dijo.
Comentó que no le gusta mucho el confinamiento, ya que ama ir a la escuela:
“Me gusta mucho la escuela porque me gusta ir con mis amigos y aprender”, por eso invitó a todos a vacunarse en cuanto sea posible y a recibir otra dosis de seguridad.
“Que estemos protegidos todos y todas, que las escuelas no se cierren nunca más y que no tengamos que continuar con tantas medidas de prevención tan estrictas”.
Para Janeth Andrea Castañeda es una “bendición” vacunar a Lucía y Fernando, aunque este último haya soltado algunas lágrimas, ya que no le gustan las agujas. Resaltó que saber que tienen una de dos o tres dosis, que los puede proteger, es reconfortante.
“Para mi hija mayor, esta es la dosis de refuerzo, y para el otro, es la primera dosis. Precisamente, dado que se avecinan temporadas de frío y se ha escuchado de más casos, si la universidad nos brinda la oportunidad, definitivamente la aprovecharemos”, afirmó.
