Cuautitlán/Estado de México
La Secretaría de Seguridad (SS) del Estado de México trasladó a diversos penales estatales a 915 Personas Privadas de la Libertad (PPL) que cumplían una sentencia en el centro penitenciario de Cuautitlán.
Con lo anterior, la Subsecretaría de Control Penitenciario, redujo en un 220% la sobrepoblación y hacinamiento, es decir, pasó de mil 688 a 733 internos, lo cual permitirá atender puntualmente el Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria (DNSP) pemitido por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) que señala la necesidad de mejorar aspectos que garanticen la integridad física y moral de los internos, así como una estancia digna.
La movilización se llevó a cabo de forma pacífica y sin complicaciones; además fue supervisado por personal de la Comisión de Derechos Humanos en el Estado de México (CODHEM); también participaron 274 policías estatales, 192 elementos penitenciarios, y 80 de la Guardia Nacional, apoyados por 22 autobuses, mientras que las PPL fueron enviadas a los penales ubicados en Tenancingo Sur, Tenango del Valle, la Penitenciaría Modelo y Otumba Tepachico.
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Los beneficios, señala, no son únicamente estadísticos, pues los presos procesados que se quedarán en esta infraestructura, así como los trasladados, tendrán una mejor calidad de vida con la creación de espacios dignos que permitan garantizar sus derechos y fomentar una plena reinserción social, los cuales son la clave para lograr un sistema penitenciario moderno, que cumpla con su vocación de prevenir el delito.
Lo anterior, dijo la dependencia, con apego irrestricto a los derechos humanos y en seguimiento al Decálogo de Seguridad de la actual administración, mismo que contempla fortalecer el sistema penitenciario mexiquense.
Este esfuerzo, apuntó, se suma a las medidas vigentes que son: el acuerdo con el Poder Judicial para facilitar los beneficios de Ley a las personas privadas de su libertad y aumentar el número de brazaletes electrónicos; la aplicación de la Ley de Amnistía y las ampliaciones de la infraestructura penitenciaria que se ha visto favorecida con la apertura del Centro Penitenciario Tenancingo Sur, y la próxima construcción de dormitorios en Tlalnepantla y Chalco, lo que dará cerca de dos mil espacios adicionales.
La dependencia reafirmó la convicción de impulsar un trato justo y apegado a derecho en beneficio de la población reclusa, así como crear un ambiente propicio que favorezca la reinserción social; además refrenda el compromiso de seguir trabajando para que los centros penitenciarios del Estado de México sean un modelo nacional de protección de los derechos humanos.
