Toluca/Estado de México
Colaboración especial de Emily Miguel
La memoria dignifica la vida de las víctimas. En la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UAEMÉX, se llevó a cabo el primer seminario de "Desafíos Sociales Contemporáneos", donde el periodista Paris Martínez, defensor de los derechos humanos, expuso los hallazgos de su investigación sobre la violencia sistemática y la impunidad en México. Esta investigación, desarrollada a lo largo de tres años, dio origen al libro Permiso para matar, una obra colectiva en la que participaron también Daniel Moreno, director editorial de Animal Político, y Jacobo Dayán, columnista en Aristegui Noticias y especialista en derechos humanos.
Ejecutan al periodista Calletano de Jesús Guerrero en #Edoméx
El libro aborda la violencia generalizada en México, perpetrada desde el Estado bajo el pretexto del ejercicio de sus funciones. Según Martínez, esta violencia no es un fenómeno reciente, sino que se ha prolongado por tres lustros, con sus inicios en la ola de violencia de 2007, dejando alrededor de un crimen de Estado cada 5 días por 17 años. El seminario también buscó generar un debate sobre la manera en que se cubre la violencia en los medios de comunicación.
Uno de los puntos centrales de la discusión fue el papel del llamado "ejecutómetro", un mecanismo que medía los índices de violencia actualizándose cada 24 horas, pero que, en lugar de sensibilizar, terminó por volver números a las víctimas. Ante esto, los periodistas decidieron cambiar el enfoque y contar las historias individuales de las personas afectadas. Sin embargo, esto llevó a otro problema: se perdía la dimensión generalizada del problema. Por ello, Permiso para matar busca equilibrar ambas perspectivas, presentando pruebas tangibles de cómo la violencia en el país es tanto generalizada como sistemática.
La investigación logró documentar 1,800 casos de ejecuciones y desapariciones forzadas, utilizando bases de datos gubernamentales y el apoyo de la organización Data Cívica, que empleó herramientas de programación y automatización para rastrear información en la web. A partir de estos datos, los periodistas pudieron identificar patrones de violencia y cómo se ha perpetuado la impunidad a lo largo de distintos gobiernos.
Uno de los hallazgos más impactantes fue la existencia de cartas de militares dirigidas a la Presidencia, donde expresaban las secuelas psicológicas de los crímenes de guerra en los que participaron. Además, se expuso la violencia psicológica sufrida por niños que quedaron huérfanos debido a ejecuciones extrajudiciales perpetradas por fuerzas del Estado.
Asimismo, el seminario abordó el riesgo que enfrentan los periodistas al investigar estos temas, ya que los índices de violencia contra la prensa a menudo son invisibilizados. Se denunciaron intentos de censura estatal desde la "guerra contra el narcotráfico" hasta la actualidad. Aunque el gobierno actual ha mostrado una postura de "supremacía moral", según los periodistas, persisten las autocensuras y las barreras para la difusión de información crítica.
La discusión concluyó con una reflexión sobre la necesidad de hacer memoria y visibilizar estas problemáticas para lograr un cambio real en el futuro. Sin embargo, según los ponentes, el mayor obstáculo sigue siendo la falta de voluntad política y los intereses personales que perpetúan la violencia en México.