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Cebrasno. Este animal es el resultado de la cruza de una cabra y un asno. Se desconoce el lugar de origen, pero existe la creencia de que fueron mezclados en pueblos indígenas por ser muy útiles para el transporte de carga y mercancía. Estas especies se pueden encontrar desde México, hasta lugares de Sudáfrica. El primero que nació en México fue en el 2006, en el zoológico de Reynosa, Tamaulipas, después de que una cebra y un burro albino se cruzaron, a pesar de no ser compatibles genéticamente.

Gato Savannah. Es un felino exótico que nació de la cruza de una gata siamés y un cerval africano en 1986. Se cree que el objetivo de crear esta nueva raza fue su comercialización, pues cada gato se vende hasta en 4 mil dólares. Se caracteriza por tener un temperamento algo agresivo, no temerle al agua y ser fácilmente entrenados. Estas mascotas están prohibidas en Nueva York, New Jersey, Australia y Hawái.

Beefalo. Estos animales fueron el resultado de un apareamiento accidental entre un Bisonte americano y una vaca doméstica en 1749, fueron vistos por primera vez en las colonias inglesas del sur de Norteamérica. Existen muy pocas especies registradas. La industria ganadera descubrió que la carne de este animal es muy baja en calorías, grasa y colesterol, por lo que comenzaron a ser cruzados para fines comerciales. Sin embargo, las organizaciones que defienden los derechos de los animales han decidido protegerlo para evitar su posible extinción.

Coyolobo. Tuvo su origen en Ontario, Canadá, a principios del siglo 20. Es un híbrido del lobo al que la invasión humana modificó drásticamente su hábitat, obligándolo a buscar nuevos lugares dónde vivir. Se dirigieron hacia el Oeste en donde comenzaron a mezclarse con coyotes y perros. Sin embargo, no muestran conductas salvajes ni agresivas. Se les ve en zonas urbanas como, Pensilvania, Ohio y Nueva York.

Oso Grolar. Se le vio por primera vez en el 2006 cuando un cazador mató a uno. Estos animales fueron cruzados bajo el control de biólogos expertos. Hoy existen pocos, pero se cree que irán aumentando con el paso del tiempo y el deterioro del medio ambiente. Es el resultado de la cruza entre un oso polar y un oso grizzly.

Ligre. Es una especie poco conocida, su origen se remonta hasta el siglo XIX en la India, producto de un experimento en el que mezclaron a un león y un tigre. Se cree que fueron creados con la intención de ser vendidos ya que alcanzan precios de varios miles de dólares. Pueden llegar a medir cinco metros de largo y a pesar hasta 500 kilos. Devoran toda clase de animales grandes. Por ser tan exóticos, la mayoría de ellos se encuentran en cautiverio para seguir siendo estudiados.

Jagleón. Es la mezcla entre un pantera y un león, se ha dado en cautiverio, motivada para fines de estudio. Existen pocas especies y se encuentran bajo protección porque pertenecen a zonas ecológicas. Se caracterizan por tener manchas en su cuerpo, su complexión es semejante a la de un león, y a diferencia de éste, el macho no tiene melena.