Diablo: ¿Podría decirle al Doctor Complejo que quiero verlo, por favor?
Recepcionista: ¿Tiene usted cita?
Diablo: No, señorita, no vengo a consulta, solamente quiero saber de un amigo mío que es paciente del Doctor.
Recepcionista: Los expedientes psicológicos de los pacientes son confidenciales.
Diablo: No quiero saber eso, sino sólo los resultados del laboratorio de mi amigo Simplicio.
Recepcionista: Ah, por ahí hubiera empezado. Precisamente el Doctor acaba de salir a su casa para comunicarle los resultados de los exámenes al señor Simplicio y a su enfermera Ángela, que lo cuida desde que tuvo el desmayo o lo que fuera que le sucedió aquí mismo en el consultorio.
Diablo: Entró en coma, pero ya despertó. Demonios. Bueno, muchas gracias. Me voy para allá a alcanzarlos.
(El Diablo se transporta a la velocidad de Lucifer y aparece precisamente cuando el Doctor Complejo inicia charla con Simplicio)
Simplicio: Pues bien, Doctor, dígame qué novedad me tiene de esos exámenes...
Doctor Complejo: Simplicio, como lo sospeché desde un principio, no hay ningún indicio físico de anormalidad en tu organismo. No hubo infarto, ni shock diabético.
Simplicio: ¿No me infectó el Coronavirus?
Doctor Complejo: En esta prueba no aparecieron rastros del invisible bicho, pero como el periodo de incubación es de alrededor de 14 días, tendrás que estar en cuarentena como prevención.
Simplicio: Entonces, ¿qué me pasó?
Doctor Complejo: Tuviste suerte que te atendiera yo pues evité que por equivocación llegando al hospital te hubieran metido junto con los infectados y entonces sí nunca hubieras sabido lo que te pasó.
Simplicio: Sí, pues...entonces, ¿cuál fue la causa del coma?
Doctor Complejo: Fue un singular fenómeno multifactorial, muy complejo. Parece ser que se suscitó una muy compleja reacción antihistamínica por tu alergia anual de la fiebre de primavera, pero que esta vez se combinó con el gran stress económico-laboral. Además, se sumó la conjunción del shock psicológico que ha provocado el prolongado aislamiento social para contener la epidemia del COVID-19 y el detonador final del coma fue la culminación de un complejo trauma infantil que recordaste en el curso de la sesión que tuvimos ese día.
Simplicio: Uffff, ¿y no hay peligro de que eso se repita?
Doctor Complejo: Es un fenómeno muy complejo, pero si las causas se repiten, el mal se repetirá. Por eso hay que darte un tratamiento especial que precisamente evite la repetición de esos fenómenos y la enfermera Ángela seguirá cuidándote día y noche hasta que estés fuera de peligro.
Simplicio: ¿Ángela? Por fin sé su nombre... y seguramente bajo esa máscara protectora se esconde un bello rostro angelical.
Doctor Complejo: Ejem...mira, Simplicio, al grano, pronto tu alergia primaveral obviamente desaparecerá en cuanto termine la primavera. Por su parte, Ángela te hará compañía para aliviar el aislamiento social a que obliga la actual pandemia, por supuesto manteniendo su sana distancia. En cuanto al stress económico y laboral tendremos que hablar con tus jefes para que reduzcan tu carga de trabajo pero no tu sueldo. Y por mi parte re orientar las sesiones psicoanalíticas para sustituir la indagación de tus complejos traumas infantiles por una novedosa terapia adaptada a las circunstancias para combatir la depresión y que puedas regresar gradualmente a la nueva normalidad.
Simplicio: Está difícil no caer en la depresión con todo lo que está pasando en el mundo. En fin, ¿cuál será esa novedosa terapia?
Doctor Complejo: Para empezar deberás ver completas todos los días las conferencias mañaneras de Ya Sabes Quien, con lo que seguramente levantarás el ánimo y te olvidarás de todos los datos negativos y opiniones tóxicas que pululan en las malditas redes sociales. También debes ver los mensajes de fin de semana y los especiales. No hay mejor cura que el optimismo. Con eso y la compañía y cuidados de Angelita esto pasará y serás de nuevo normal.
Simplicio: Ojalá...oiga, Doctor Complejo, y supongo que como por este tiempo de recuperación no habrá psicoanálisis, ya no tendré que pagar consultas...
Doctor Complejo: No lo creo, no lo creo...la Asociación Mental Mundial nos tiene prohibidas las condonaciones. Además, cada visita mía, así sea por videoconferencia, vale como sesión terapéutica y tiene que pagarse.
Simplicio: Bueno, por lo menos diferir los pagos...
Doctor: ¿Por qué? De ninguna manera, ¿de qué va a vivir la enfermera? ¿Y Yo? ¿Quieres sumarnos a los más de diez millones de nuevos pobres que provocó la pandemia en este país?
Simplicio: Bueno, no, no...sólo pensaba en una ayudita por la nueva normalidad....
Doctor Complejo: En esta normalidad, el principio es !Primero los Doctores y las Enfermeras! Los demás, pueden esperar según el semáforo y rascarse con sus propias uñas para enfrentar la nueva normalidad, claro, con las manos siempre bien lavaditas.
Simplicio: Espero que esta bendita terapia funcione...y no acabe yo peor que un NiNi sin subsidio, como un nuevo pobre más, gracias a ya saben quién...
(Diablo: por lo visto, en este diálogo yo estoy de florero...pero el Doctor Complejo propone, la angelical enfermera cree que dispone, pero no cuentan con mi astucia y Ya Sabrán Quien se los descompone...ya verán)
Mayo 2020
