Diablo: Quihubo, Simplicio, ¿dónde demonios andabas? Te he buscado por tierra y por mar… y no te he podido hallar.
Simplicio: Claro, como que estaba en el cielo, donde tú no tienes acceso…
Diablo: Ah, caray, ¿qué ya te moriste y ni me avisaron, para ir por ti?
Simplicio: Ganas tienes, ¡Maldito Demonio! Pero no se trata de eso…la verdad, ni para qué te cuento, ni tú ni nadie me lo va a creer.
Diablo: Ah, caray, pues ¿de qué se trata, mi celestial amigo Simply?
Simplicio: No me lo vas a creer…
Diablo: Vamos, vamos, Simplicio, no la hagas de tos.
Simplicio: En realidad, es muy simple: mis amigos extraterrestres me invitaron a asistir a un Congreso Intergaláctico…
Diablo: Santos demonios, ¿y dónde y cuándo tuvo lugar ese secuestro?
Simplicio: No fue secuestro, fue una atenta invitación que me hicieron justamente después de las recientes elecciones en México y me transportaron en su nave espacial a un lugar en las nubes…
Diablo: Caramba, ¿y de qué se trató el Congreso Intergaláctico?
Simplicio: Pues quieren los extraterrestres comprender el sistema terrícola de gobierno, porque -dicen ellos- no entienden ni madres, especialmente la Democracia real, con tantas modalidades actuales, como las pasadas elecciones en Estados Unidos y las muy recientes en México.
Diablo: ¿Y tú qué diablos sabes de la política de Estados Unidos?
Simplicio: Nada, para eso los alienígenas invitaron al famoso lingüista Chomsky, porque para empezar los extraterrestres tienen dificultades con los diferentes idiomas que usamos en este planeta.
Diablo: ¿Y en México no hay lingüistas famosos?
Simplicio: Pues hay muchos en la Asociación Mexicana de Lingüística Aplicada y cantidad de filólogos, hispanistas, lexicógrafos y traductores por ahí, pero ninguno vivo tan famoso como, por ejemplo, este americano Chomsky, que a sus 92 años sigue lúcido. Lo invitaron al Congreso Intergaláctico principalmente por su muy vigente libro Miedo a la Democracia, además de sus ideas originales sobre el lenguaje.
Diablo: ¿Y a ti por qué te escogieron?
Simplicio: Sólo Dios sabe…me imagino que me ha de haber recomendado mi extraterrestre Ángel de la Guarda, por mi interés en la comunicación universal, siempre dispuesto al diálogo con amigos y enemigos, hasta contigo, soberbio y escéptico Demonio, constante creador de caos.
Diablo: Me encanta el caos… democrático, concretamente en su modalidad narcodemocrática y, especialmente, la mexicana.
Simplicio: ¡Maldito Demonio calumniador!
Diablo: A todo esto, ¿qué explicación diste a los extraterrestres sobre el sistema político mexicano?
Simplicio: Pues para empezar les aclaré que por tu culpa no hay ni ha habido nunca ningún sistema en la política mexicana y para acabar pronto les dije que si no entienden ni madres de la política en México es porque efectivamente todo es ni más ni menos que un desmadre completo, sin importar qué partido o coalición esté en el poder. Y todo por culpa tuya.
Diablo: ¿Y Yo Por Qué? ¿Tengo Yo la culpa del desmadre que han hecho los gobernantes mexicanos desde Guadalupe Victoria hasta ya sabes quién?
Simplicio: Sin duda. Tú mismo admites que te encanta el caos…
Diablo: Yo sólo soy un mediador, un “influencer” que canalizo las destructivas tendencias innatas del pueblo mexicano y sus creativos ciudadanos a quienes les encanta el relajo…
Simplicio: ¡Demonio Mentiroso! El pueblo de México es bueno, bueno, bueno…
Diablo: Pues las descontentas élites siguen Hoy, Hoy, Hoy poderosamente presentes y junto con las inquietas clases medias, ambas clases regeneradas políticamente, gracias a los ataques de ya sabes quién que les tunde cada mañana con singular alegría…Feliz, Feliz, Feliz…como el pueblo bueno.
Simplicio: Todo eso por la emocional polarización que has provocado creando dos bandos opuestos, maldito Demonio.
Diablo: Bueno, Simplicio, son demasiados insultos de tu parte…te pareces a ya sabes quién. Mejor me voy a descansar al extraterrestre inframundo, porque lo que es esta Tierra está de locos…Y, a propósito, ¿a qué conclusiones llegaron en ese singular Congreso Intergaláctico?
Simplicio: En realidad, no lo sé, pero parece que las ideas de Chomsky sobre las fallas de la democracia mundial hicieron que los extraterrestres se dieran por vencidos y dudaran de invadir a este planeta caracterizado por un sistema tan caótico que no logran entender cómo subsiste y mejor esperarán a que democráticamente se disuelva solito y lo sustituya una autocracia que sea eficiente, si es que eso puede existir en esta Tierra.
Diablo: Corren rumores por las galaxias que ese grupo de extraterrestres está impulsando el desarrollo del sistema chino, que les parece que está destinado a reemplazar la declinante hegemonía norteamericana.
Simplicio: ¡Fake News! Puras mentiras tuyas, Diablo, ¡rojillo socialista!
Diablo: Tu injuria no me llega, tu calumnia no me toca, Simplísimo Simplicio. ¿Qué no sabes que no hay sistema socialista chino y que, en cambio, China es hoy el país más capitalista del mundo?
Simplicio: El más autocrático de los países capitalistas, sí, pero el más capitalista, no. Lo siento, estimado Diablín, pero creo que por esta vez estás rotundamente equivocado, para que lo sepas el país que es el paraíso de los capitalistas es, aunque usted no lo crea… ¡México!
Diablo: Creo que este Simplicio ve el mundo al revés desde que regresó de su celestial Congreso con los extraterrestres…jajajajajajajaja