Tengo el honor de ser presidente de la (ASECEM) Asociación de Empresarios y Ciudadanos del Estado de México, capítulo Huixquilucan, por tal motivo me reúno casi todos los días con distintos empresarios de diferentes rubros. Me ha sorprendido muchísimo que casi todos están temerosos y con mucha incertidumbre de que no se concrete una gran alianza entre todos los partidos políticos que son oposición a Morena y lo que podría pasar si este partido que gobierna a nivel federal llegara a ganar el Estado de México.
Morena ha logrado posicionarse como sinónimo de incertidumbre para todo aquello que signifique inversión, protección al empresariado y fomento de la economía, me comentan muy tristes mis colegas.
Desafortunadamente los datos, los resultados y el comportamiento agresivo y cotidiano de diferentes actores de esta corriente política, le dan la razón a los empresarios.
De todas estas conclusiones tan diversas que me he topado en mis diferentes platicas, una de las más frecuentes es que los partidos de oposición no están leyendo el sentir de la sociedad y que como siempre están velando por sus mezquinos y personales intereses
¿Y cuál es su propuesta de solución? La opinión generalizada es que cada partido de oposición a Morena elija su candidato mejor posicionado y posteriormente se haga una evaluación transparente y democrática firmada y aceptada entre todos ellos y de ahí salga el mejor candidato cuantitativamente y cualitativamente; y atrás del ganador todo este bloque perfectamente unido con una misma estrategia y con la idea clara de primero ganar la elección, segundo detener la inercia de Morena, y tercero consolidar un proyecto de gobierno de coalición que demuestre que sí puede haber entendimiento entre las diversas fuerzas políticas cuando se antepone el bienestar de todas y todos los ciudadanos.
Personalmente creo que esta formula tiene mucha congruencia y por supuesto que casi todos los que la han pensado están conscientes de ello y están de acuerdo; solo faltaría agregarle un ingrediente muy, pero muy especial a esta gran receta y es: qué está pensando el Gobernador Alfredo Del Mazo, qué acuerdos tiene con Palacio Nacional a cambio de un séptimo año lleno de tranquilidad para él y los suyos o, en caso contrario, una probable persecución y desprestigio.
Mi humilde conclusión es que si la alianza no se da formalmente entre todos los partidos de oposición, toda la ciudadanía que está en desacuerdo con Morena, haga de facto una alianza.
¿A qué me refiero? Faltando dos semanas para la elección y tomando en cuenta que todos los partidos contarían con candidata o candidato y regresando a la lógica matemática, veamos en ese momento quién de la oposición es el más adelantado en las encuestas serias y sin distinguir colores, sabores, ideologías, y dándole una lección a los partidos de oposición, votemos por ese candidato y en ese momento se estaría consolidando una alianza ciudadana, sacando de la jugada los intereses personales que solo buscan perpetuar su impunidad.
Los empresarios deberíamos hacer pesar más nuestra voz, ya que en México nueve de cada diez empleos los crea la iniciativa privada y el cien por ciento de las decisiones trascendentales para nuestro país las toman los políticos, que en muchos casos no saben ni escribir su propio nombre.
Reflexionemos más y mejor, no seamos omisos de nuestro entorno y construiremos una mejor patria.
