La historia de las grandes mafias, en el mundo, se ha caracterizado porque estos criminales tratan de proteger y conservar sus territorios de actuación. Independientemente de los países donde han surgido los grupos delincuenciales, éstos tratan de crecer y aprovechar los fenómenos sociales para expandir sus redes delictivas. Tenemos, por ejemplo, que la mafia italiana se asentó en los Estados Unidos de Norteamérica, surgiendo así quienes operaron durante la prohibición y creció en grandes promociones; también las triadas surgidas en China expandieron sus redes a través de la inmigración a muchos países de América y esa acción sigue manifestándose con la piratería y la pornografia en grandes cantidades.
En nuestro país, los principales cárteles de la droga buscaron siempre la expansión a otros territorios y por eso surge una guerra cruenta para lograr el crecimiento de sus redes a fin de tener más poder. Si recordamos los principales cárteles de la droga se caracterizaban por el territorio donde desempeñaban su ilegal labor, así surgieron el Cártel de Sinaloa, el Cártel de Tijuana y el Cártel del Golfo, cuyo origen viene de la división que se hace cuando son detenidos Ernesto Fonseca Carrillo, Rafael Caro Quintero y Miguel Angel Félix Gallardo; y que heredan a Amado Carrillo Fuentes, "El Chapo" Guzmán y los hermanos Arellano Félix, respectivamente, acrecentándose la idea de la expansión y estando al frente de estas organizaciones. Si recordamos, las batallas territoriales cobraron un gran número de víctimas entre delincuentes y ciudadanos inocentes, además de provocar la división de los principales carteles en un gran número de grupos que se extendieron a lo largo y ancho del territorio Nacional.
¿Y por qué recordar estos tristes capítulos de la historia nacional que solo nos llenan de indignación?, ¿por qué hacer remembranza de una guerra que costó vidas inocentes? Porque esos capítulos no han terminado, la zozobra e incertidumbre de muchas poblaciones de nuestro país y muchos mexicanos continúa día a día, solo basta escuchar las últimas noticias para darnos cuenta que la delincuencia sigue vulnerando a una sociedad trabajadora y progresista y aterrando a quienes todos los días salen a buscar el sustento de sus familias y saben que pueden ser victimas de los criminales.
Me refiero al caso de tres estudiantes de cine que inocentemente buscaban una locación para su documental y fueron asesinados cruelmente por miembros del cártel Jalisco Nueva Generación, al pensar que eran miembros de una pandilla contraria en su territorio y para no permitir la expansión de sus enemigos los eliminaron sin constatar que solo se trataba de inocentes.
Estas acciones indignantes sólo demuestran el desafío de la delincuencia a una sociedad herida y aterrorizada que sólo podrá defenderse con un cambio de paradigmas en las nuevas generaciones y apoyados por instituciones fuertes y honestas.
Ese sentimiento de coraje debemos traducirlo en acciones que nos lleven a recomponer el tejido social, recordemos que una ciudadanía fuerte en conjunto con un gobierno ejemplar pueden vencer cualquier acción fuera de la legalidad.
Por cierto: El ejemplo comienza por los ciudadanos, nosotros somos la solución.
