De los contendientes que participaron en los comicios celebrados el pasado primero de julio, sin duda, muchos resultaron favorecidos sin mayor esfuerzo por el efecto AMLO, quien literalmente colgó su imagen en la publicidad de cada candidato que participó por Morena; y al mismo tiempo, varios de ellos, quienes hasta antes de esa fecha eran unos perfectos desconocidos, sin labor social o proselitista, alcanzaron la gloria bajo la imagen del que durante tres sexenios trabajó su objetivo, y se fue por la libre, sin que aparentemente nadie lo molestara.
El éxito del tabasqueño va de la mano con un ágil trabajo bien realizado que llevaron a cabo sus operadores de redes sociales, los maestros, que a la postre representaron la ecuación perfecta que logró penetrar en el grueso de los posibles votantes, con las frases que identificarían al líder y creador de Morena, así como su posición anti sistema, y que al no haber obstáculo aparente, cargó con todos los demás que se dejaron llevar por la marea que levantaba el morenista.
Por lo que de pronto, varios se vieron con un triunfo que ni siquiera trabajaron, el desconocimiento del municipio o distrito que ahora representan, es notorio. La ignorancia y soberbia es un sello que se ha caracterizado en los que logran el cometido de esa manera, lo mismo sucedió cuando Vicente Fox en el año 2000 se llevó de jalón con su triunfo a los panistas. Así sucedía en la época dorada del PRI.
Pero como en todo hay sus honrosas excepciones. Es el caso del municipio de Toluca, Juan Rodolfo Sánchez Gómez, un viejo conocido de la capital de la entidad mexiquense por haber gobernado en el periodo 2006 - 2009, aunque vistiendo de color azul en su primera incursión, ahora bajo las siglas de Morena, vuelve a ganar la presidencia y se espera marque diferencia con el gobierno de Fernando Zamora.
Por principio de cuentas, reconocer los problemas que aquejan al municipio que gobierna, es muestra de madurez política, y es la realidad que la gran mayoría de los ciudadanos sufre en carne propia, inseguridad, servicios, ambulantaje, desorden, son sólo algunos de lo que enfrentan los toluqueños diariamente.
Es la inseguridad uno de los reclamos más sentidos de los habitantes del municipio, reconocer que en la capital hay presencia de entre tres y cinco organizaciones criminales es de aplaudirse, porque de lo contrario, sería como voltear la cabeza hacia otro lado, esto le motivó a hacer un enérgico llamado a las autoridades federales y estatales.
Partiendo de este punto, que no es fácil para cualquier político, toma las riendas de este espinoso tema para combatir la inseguridad, y para poder estudiar la forma en la que habrá de hacerle frente.
Asimismo, y pese a que son odiosas las comparaciones, pero se tienen que hacer, el desorden de los comerciantes ambulantes que Fernando Zamora nunca pudo controlar, Juan Rodolfo toma el riesgo como en su periodo anterior y con un golpe de autoridad hace lo que se debía. Es lógico que estas acciones molesten a muchos, pero por otro lado, otros se lo agradecen, en especial, los comerciantes establecidos que pagan impuestos.
Es en este momento en donde sí hay que hacer una diferencia con el gobierno federal, Juan Rodolfo da muestra de la autoridad que se debe ejercer para que prevalezca el orden, la confianza que le dieron los votantes ya la manifestaron en las urnas.
Juan Rodolfo fue el único Presidente Municipal que hizo frente al desabasto de gasolina que azotó a la economía y movilidad de la zona centro del país, y por ende, al valle de Toluca, en un tema que no le corresponde por su competencia, pero no por ello se quedó de brazos cruzados.
Y puede ser que ésta situación lo coloque en una posición envidiable para aspirar a un cargo de mayor envergadura, está en todo su derecho. Así como el edil de Huixquilucan, Enrique Vargas del Villar, no hay que perder de vista a ambos políticos, tejen su futuro.
Deberían tomar nota los demás partidos, las siglas de un partido, no es garantía de resultados, el PRI lo demostró por mucho tiempo, siempre favoreciendo a sus cuadros mejor posicionados “familiarmente” no por méritos propios, y esa misma práctica con necedad insisten en conservarla, como si los tiempos les favorecieran, y lo mismo sucedió por contagio en el PRD y en el PAN.
Aunque de acuerdo a los últimos movimientos que se dieron en el gobierno federal, van que vuelan para continuar la tradición, a ver cuánto les dura, aunque parece que su líder, López Obrador que la hace de todo, tiene encantados a la mayoría de los mexicanos, los tropiezos de sus decisiones en algún momento cobrarán la factura, como ya se las cobra a los muchos que votaron por ese sueño seductor, pérdidas económicas, despidos, escasez y lo que falta por venir.
