En días pasados fuimos testigos y partícipes de las comparecencias que, como parte de la Glosa del Cuarto Informe de Gobierno del Gobernador Alfredo del Mazo Maza, presentaron las y los Secretarios del Gabinete del Gobierno Estatal ante la Legislatura Local; esto con la finalidad de informar sobre el estado que guardan las dependencias de la administración pública bajo su responsabilidad.
En este sentido, y de acuerdo con Luis Carlos Ugalde, el llamado de los congresos locales a los funcionarios de los gobiernos estatales para comparecer se da por tres motivos: para aclarar o ahondar en la discusión de algún tema relacionado con su área; para evaluar una legislación que se discute en la asamblea; o bien para informar al pleno sobre los avances de su ámbito de acción.
Por consiguiente, el cumplimiento de las comparecencias es, sin lugar a dudas, la ocasión idónea para que el gobierno en turno rinda cuentas y transparente sus actividades, y también para que las y los legisladores tengamos la oportunidad de escudriñar a fondo los puntos relevantes contenidos en el Informe Anual de Gobierno, a través de un ejercicio de comunicación respetuosa y plural que vele por que los intereses y las demandas ciudadanas estén siendo atendidas de la mejor manera.
Con relación a la rendición de cuentas, las comparecencias permiten que los ciudadanos conozcan de forma detallada las acciones llevadas a cabo por cada una de las dependencias del Gobierno Estatal, ejerciendo así su derecho a la información pública y teniendo además la oportunidad de analizar dichas acciones a través de las participaciones de las y los legisladores para consolidar un juicio sólido que les permita calificar el desempeño de las y los titulares de cada Secretaría.
Al mismo tiempo, las comparecencias son un elemento que indiscutiblemente fortalece la gobernabilidad, entendida como un estado de equilibrio en el ejercicio del poder político, caracterizado por la cooperación e interacción entre el estado y los actores políticos, con el objetivo de encontrar soluciones integrales a las demandas sociales, de forma eficaz y legitima, bajo los principios de legalidad, tolerancia y respeto a la democracia. Es en este sentido, como mencioné en mi participación durante la comparecencia del Secretario General de Gobierno, que un gobierno eficaz requiere de una relación colaborativa entre los poderes del Estado y los distintos órdenes de gobierno, para sumar esfuerzos en la consecución de objetivos comunes en donde prevalezca el bienestar de la población.
En definitiva, el diálogo constante entre el Poder Legislativo y el Poder Ejecutivo requiere ser una tarea ininterrumpida, que permita continuar construyendo una gobernabilidad sólida, en total respeto a la pluralidad de ideas y con voluntad política para llegar a acuerdos que se traduzcan en acciones de gobierno que mejoren la calidad de vida de las y los mexiquenses.